La madre de Líder y Perla, Doralicia Cuenca, denunció el pasado domingo en Ciudad del Este que esta última estaba desaparecida. El miércoles, Roberto, otro de los hermanos, recibió la última llamada reclamando un pago de cerca de 40 mil dólares por la liberación.
Ese mismo día, Perla apareció y confesó que se traba de un autosecuesto. El objetivo era sacarle dinero a Líder. La mujer fue detenida y luego imputada por simulación de hecho punible. La expectativa de pena carcelaria es de hasta cinco años.
“Jamás me imaginé que algo tan grave iba a pasar en mi familia, pero pasó y hay que sacar lo positivo, que es que no pasó a mayores y que no estuvo en juego la vida de mi hermana, porque desde un principio yo pensé que era un secuestro en serio”, dijo el futbolista a radio Ñandutí.
“A mí me dolió en el corazón, pero sé que mi hermana no es mala gente. No sé que le habrá pasado por la cabeza, pero yo le disculpo, como toda la familia. Espero que recapacite ahí desde donde está", agregó.
Líder Mármol, de 25 años, es defensor del Atlante mexicano desde este año. Confesó que lo sucedido le afectó bastante a nivel laboral. “Me afectó bastante en el trabajo. No tenía cabeza para ir a entrenar y para pensar en otra cosa”, dijo.
“Tengo un contrato acá que cumplir. Pedí permiso y me dieron. Tenía intención de ir a resolver personalmente el tema, pero no hizo falta. Gracias a Dios se aclararon las cosas, por más de que nos duela lo que pasó", reflexionó.
“Le agradezco a Dios porque se aclaró", concluyó.