Se trata de César Insfrán (28), veterinario, quien habría recibido una llamada telefónica para un servicio de veterinaria; en ese momento fue raptado por cuatro a cinco personas, según datos.
Tras llevar a su víctima, los captores se habrían contactado con los familiares, a quienes solicitaron la suma de USD 50.000 por la liberación del médico veterinario.
Autoridades del Departamento de Investigación de Hechos Punibles de Amambay iniciaron sus labores luego de que circularan en Whatsapp, audios de César Insfrán, quién, según informes, mencionaba en los audios que había sido secuestrado.
Los mismos llegaron hasta la veterinaria, propiedad de la familia del joven, de nombre MG Veterinaria, ubicada sobre la Línea Internacional casi Colón del barrio San José, de Capitán Bado, donde los empleados informaron que el dueño no se encontraba en ese momento y desconocían el hecho.
Las autoridades mencionaron que trataron de contactar con la familia de la víctima, pero no tuvieron algún tipo de respuesta o retorno de los mismos, pero al final confirmaron el hecho de secuestro del veterinario.
Luego de un trabajo de inteligencia, los oficiales de Investigación encontraron a Insfrán en un sojal, en ropa interior y con varios golpes en todo el cuerpo.
El comisario César Casco, jefe de Investigaciones, informó a NPY que el joven fue llevado hasta un centro asistencial de la zona para que pudiera recibir los primeros auxilios hasta el momento no ha podido brindar más detalles sobre sus captores, ya que se encontraba en estado de shock y extremadamente agotado.
Agentes especializados en antisecuestros del Ministerio Público llegaron hasta el sanatorio privado donde quedo internado el veterinario. Los mismos pudieron conversar con los familiares de la víctima y confirmaron que tras recibir el pedido de los USD 50.000 de los captores y como no lo conseguían, recibieron videos donde se ve a la víctima siendo torturada.
Los familiares consiguieron USD 30.000, monto que fue aceptado por los captores, quienes posteriormente liberaron a César Insfrán en la colonia Ka’aguy Poty, cerca de un arroyo.