Por Carlos Aquino y
Víctor Cáceres
Los 2 suboficiales de la Policía Nacional que se encontraban desaparecidos desde el pasado martes fueron encontrados sin vida, ayer a la siesta, dentro de un automóvil Gol, en la colonia Río Verde, distrito de Santa Rosa del Aguaray. El vehículo estaba en un maizal. Las víctimas presentaban impactos de balas.
Las víctimas fatales son Benito González Leiva (49) y Milciades Sosa Morel (27), quienes prestaban servicios en la Brigada de Investigación de Delitos de Santa Rosa del Aguaray.
Aproximadamente a las 13:30 de ayer, una avioneta con policías a bordo, que sobrevolaba la zona, divisó el automóvil Gol, color verde, chapa ARE 835 Paraguay, propiedad de Benito González.
El rodado en cuestión se encontraba en un maizal de los menonitas de la colonia Río Verde, aproximadamente a 1.500 metros de la ruta principal y 10 kilómetros de la zona donde el martes pasado al mediodía se produjo una balacera, ocasión en que las víctimas fueron vistas por última vez.
hallazgo. Los investigadores acudieron al lugar y encontraron los dos cuerpos en el automóvil. Milciades Sosa estaba en el asiento trasero con cinco impactos de bala, mientras que Benito Leiva se encontraba en la valijera, con cinco heridas de armas de fuego, explicó el médico René Araújo, del centro de salud local, quien ofició de forense.
Los investigadores añadieron que, según el forense, ambos cuerpos presentaban impactos de balas de calibre 357, y otras heridas que se sospecha son de armas largas.
Ambos suboficiales aún tenían en sus cinturas los teléfonos celulares que utilizaban en vida. Sus armas reglamentarias, dos revólveres calibre 38 y una escopeta calibre 12, no se encontraron, por lo que los investigadores suponen que fueron robadas por los asesinos.
El automóvil Gol, perteneciente a Benito González, tenía puesta la llave. El rodado estaba en perfectas condiciones, aunque presentaba dos impactos de bala: uno en el capó hacia adelante y la otra en el espejo del lado ubicado hacia el acompañante.
Aparte de los investigadores y del forense, se hicieron presentes en el lugar de los hechos las fiscalas Lilian Ruiz y Ninfa Aguilar, a más del jefe departamental, el comisario Dionisio Ginez, y el subcomandante de la Policía Nacional, comisario Pedro Méndez Franco.
antecedentes. Todo se inició el pasado lunes, cuando el fiscal Delio González, sus asistentes, más la Policía, entre quienes se encontraban las víctimas, allanaron una estancia, supuestamente perteneciente al coronel (SR) Enrique Flecha, y realizaron un procedimiento en busca de droga. Ese mismo día, ambos policías retuvieron un camión con droga en la zona, de propiedad de Gerardo Sánchez, alias “Kelá”.
Según el fiscal González, los policías volvieron a la zona del allanamiento al día siguiente por razones desconocidas y desde ese entonces nada se supo del paradero de ambos.
La fiscala Lilian Ruiz, en declaraciones a la prensa, aseguró que el hecho tenía relación con el narcotráfico.
Una de las hipótesis más fuertes es que, en represalia, “Kelá”, con la ayuda de su secretario, el menonita Cornelio Wolf, quien está desaparecido, ordenó la ejecución de los dos uniformados.
Los investigadores sospechan que el fiscal González estaba al tanto de lo que iba a suceder.
Familiares critican al jefe y al ministro del Interior
Los familiares de los policías asesinados responsabilizaron del hecho al comisario José Garay, jefe de la Brigada de Investigación de Delitos de Santa Rosa del Aguaray, y al ministro del Interior, Rogelio Benítez.
Emigdio Leiva, hermano del policía Benito González Leiva, manifestó que el comisario José Garay es responsable del caso, porque debía saber del paradero de sus subalternos, en su función de alto jefe policial. Añadió que el mismo se negó en reiteradas ocasiones a recibir a los familiares.
Emigdio Leiva exigió a las autoridades la inmediata destitución de Garay.
Rosi Sánchez, esposa del policía Milciades Sosa, acusó al ministro del Interior, Rogelio Benítez, de no haber realizado nada para que su esposo sea encontrado con vida.
También cuestionó al comisario Garay, ya que en numerosas ocasiones se negó a recibirla, pese a que su subalterno se encontraba desaparecido La señora Rosi Sánchez se encuentra embarazada de ocho meses.
El cuerpo de Milciades Sosa fue llevado a Pedro Juan Caballero, mientras que el de Benito González fue trasladado a la localidad de Guayaybí, departamento de San Pedro.