Tanto la bancada de Honor Colorado como la de Colorado Añetete se mantienen en la posición de que la sanción debe regir para la liberal por haber señalado que más de la mitad de los legisladores ingresaron con dinero ilícito.
Basilio Bachi Núñez, de Honor Colorado, destacó que la sanción a Amarilla se da porque la misma “reconoció que compró su banca, maltrató a funcionarios, maestras y colegas, acusó a colegas de venta de votos sin pruebas reiteradamente y dijo que 70 legisladores entraron con dinero del narcotráfico al parlamento”.
También en sus redes sociales manifestó que “para algunos colegas la Constitución Nacional, la ley de financiamiento político, el reglamento, el Código de Ética solo se aplica a los diputados de la ANR. Para ellos comprar una banca es normal o fraguar sus internas partidarias ya acordadas entre cuatro paredes”.
Desde Colorado Añetete, el diputado Carlos Núñez Salinas dijo que mantendrá su voto a favor de la sanción y que probablemente toda la bancada lo hará.
En tanto, el pedido de revocatoria de la sanción reunió 35 firmas, entre ellas se encuentran las de los liberales Carlos Portillo, Celso Maldonado, Roya Torres, Esmérita Sánchez y Manuel Trinidad, quienes la semana pasada votaron a favor de la sanción y de esta forma se anticipa el cambio en el sentido de sus votos.
Édgar Ortiz, Andrés Rojas Feris y María de las Nieves López completan la lista de los 8 liberales que votaron a favor de la sanción a su colega, pero los mismos no figuran como firmantes de la nota de pedido de revocatoria.
El escrito señala que “la resolución de la sanción viola en forma flagrante el artículo 191 de la Constitución Nacional, pues afecta a la inmunidad de la diputada Celeste Amarilla en atención a que en la referida resolución fue sancionada por una opinión vertida en el desempeño de su función como parlamentaria, así también violentando sus derechos”.
Se agrega en la nota además que “la sanción a Amarilla configura un mal antecedente de consecuencias imprevisibles, pues bastaría una mayoría coyuntural para censurar, perseguir, impedir a un legislador realizar críticas y que opine libremente en el ejercicio de sus funciones”.
La diputada Celeste Amarilla dijo que no pedirá disculpas por sus opiniones vertidas ya que cuenta con inmunidad justamente para eso. Agregó que no se debe a sus colegas, “quienes están en contra del pueblo, al cual le tienen como enemigo”.
Carlos Rejala, de Hagamos, quien también está en contra de la sanción, dijo que primeramente vienen por su colega Celeste Amarilla. “Mañana vendrán por nosotros, pero acá vamos a estar, con la remera blanca de la transparencia, sin manchas”.
Hay dudas con respecto a la cifra necesaria de votos para lograr la revocación de la sanción, si es que se requiere una mayoría simple de la totalidad de diputados, o de dos tercios, lo cual implicará contar con 53 votos de los 80 diputados. El número varía de acuerdo con la cantidad de presentes.
Según el vicepresidente de la Cámara Baja, Julio Enrique Mineur, se precisará de una mayoría simple, pero si existen dudas, el pleno será que el debe decidir con qué número de votos aprobar el punto en cuestión.
Kattya González dijo que el plenario deberá definir el procedimiento ya que la Cámara Baja está habilitada para establecer su procedimiento. Indicó que la sanción se aplicó con dos tercios.
REEMPLAZO. El concejal liberal Augusto Wagner comunicó que no asumirá la banca de Amarilla por los dos meses de sanción. En caso de que no corra la revocatoria, el titular de la Cámara, Pedro Alliana, convocaría a la colorada Guadalupe Aveiro, con cuestionado antecedente.
47 fueron los votos de colorados y algunos liberales con los que se le sancionó a la diputada Celeste Amarilla.