El diputado liberal Carlos Portillo sigue siendo motivo de burlas en los medios de comunicación y en las redes sociales, a causa de sus evidentes problemas con la lengua española y su escritura.
A ello se suma su poco tacto para evitar polemizar con sus detractores en las redes sociales, poniendo aún más en evidencia sus faltas ortográficas, incluso en sus proyectos presentados ante el pleno de la Cámara de Diputados.
“La quinta pata al gallo”. Emulando a la ya fallecida diputada colorada Mirian Alfonso, Portillo indicó ayer que “le buscan la quinta pata al gallo”.
Fue durante una entrevista realizada por la Radio 1000, donde intentó una defensa ante las críticas por el viaje realizado a Cartagena de Indias, donde participó de una Cumbre Mundial de Comunicación Política.
Otro aliciente para las chanzas de los internautas es la serie de títulos universitarios que posee el legislador: siete según figuraba en el espacio de currículum de la página de la Cámara de Diputados, hasta que el contenido fue borrado sin explicaciones por la Dirección de Informática del cuerpo legislativo por orden de las autoridades legislativas.
“La universidad no acorta las orejas”, afirma otro mensaje enviado a la página de Facebook del legislador, donde, gracias a la magia del photoshop, Portillo aparece sonriente en la piel de un asno, al lado del siguiente escrito: “Hola tengo ciete titulo univercitario y me vasa envidiar mucho todavia”.
Portillo se tomó con otra persona identificada como Víctor Peña, quien le señaló su deseo de ser como él (como el legislador), viajar por todo el mundo sin hacer nada y sin estudios. También le recomendó que siga cursos de ortografía. El parlamentario respondió con agresividad llamando al ciudadano “egoísta mal parido”.
Marcia Villasanti, otra de las internautas que arremetieron contra Portillo cuestionó que tenga siete títulos de carreras que llevan 5 o 6 años. También Iván Ríos le apuntó que para hacer el doctorado, no se precisa de otros 5 años de estudio de Derecho, por lo que le trata de mentiroso.
Incluso en el currículum de Portillo hay evidentes errores ortográficos. Según el documento, obtuvo el título de licenciado en “Ciencias Política”, olvidando la concordancia de número.
No solo el currículum desapareció de la página de Diputados, sino que el propio legislador “se borró" ayer y no apareció en la sesión ordinaria que se realizó en horas de la tarde.