El tema está siendo objeto de estudio en las comisiones asesoras de Seguridad y Tránsito y Legislación de la Junta Municipal de Ciudad del Este. El problema ahora se plantea entre los propios trabajadores del volante, asegura el concejal municipal Teodoro Mercado.
El edil explicó que un grupo pretende el rechazo total de las operaciones de ambas plataformas digitales, mientras otro sector está a favor de que el servicio sea reglamentado vía ordenanza en la ciudad, con lo cual se le dará un marco legal al que deberán ajustarse para trabajar en el municipio. Actualmente no existe ninguna ordenanza al respecto.
“Hay un grupo, la Fetace (Federación de Taxistas de Ciudad del Este), que pide el rechazo total, y Taude (Taxistas Unidos del Este), que pide la reglamentación, así como también los de Uber. Hay una divergencia allí y tenemos que buscar la armonía entre ambos grupos para que se pueda trabajar sin pelearse”, refirió Mercado. El edil insistió en que la intención es buscar un punto de equilibrio entre las partes, que la situación no se salga de control y llegue a las agresiones. “Queremos que trabajen sin agredir a nadie y menos entre trabajadores. Los de Uber se basan en la Constitución Nacional y lo que dije en su momento es que los municipios son autónomos y ellos tomaron mal eso. Lo que digo es que pueden operar acá, pero deben estar regulados”, insistió el edil.
Sobre un dictamen para hoy, día de sesión ordinaria de la Junta Municipal, dijo que conversará con sus colegas y se verá si una mayoría puede decir qué es lo que se va a hacer al respecto. “Evidentemente habrá posiciones dispares, eso es natural, hay posiciones divergentes, pero tenemos que intentar apostar por la armonía y tratar de que sea lo menos perjudicial para cualquier sector”, señaló.
A finales del mes de enero los taxistas iniciaron una especie de caza a los conductores de Uber y Muv exigiendo la intervención de la Policía Municipal de Tránsito y que se les aplique multa bajo la figura de competencia desleal. Por presión, varios vehículos fueron traídos al corralón municipal y los taxistas sitiaron la Dirección de Tránsito, exigiendo la aplicación de multas.
Muv realizó la denuncia manifestando la forma ilegal en que se estaba procediendo dentro del municipio. Esta situación llevó al mismo intendente municipal Miguel Prieto Vallejos a pedir un dictamen jurídico y basó en ello en una conferencia de prensa, donde manifestó que no se podía sancionar a los conductores de Muv y Uber y que el servicio no estaba reglamentado por ordenanza municipal. De acuerdo con los datos, Muv tiene más de 200 conductores registrados que están operando en Ciudad del Este, donde suma cada vez más usuarios. El intendente se reunió con los taxistas e incluso les planteó crear una plataforma digital similar para operar, e iniciar un proceso de modernización de la flota de taxis en la ciudad, pero la propuesta fue rechaza tajantemente.