“Todavía tenemos enormes desafíos por delante, pero Brasil tiene hoy una economía fuerte, que continúa creciendo”, dijo el presidente de izquierda durante un discurso televisado para presentar sus deseos a la población para las fiestas de Navidad.
Dijo que su gobierno, que ha relanzado programas sociales desde que regresó al poder para un tercer mandato en enero de 2023, “es eficiente e invierte donde es más importante: La calidad de vida de la población brasileña”.
REAL DEPRECIADO. En las últimas semanas, el real brasileño se ha depreciado notablemente desde el anuncio de un paquete de recortes del gasto público considerado insuficiente por los empresarios, preocupados por el déficit y la inflación.
Según datos oficiales, en octubre el déficit se situó en el 9,52% interanual, y la inflación a un año llegó en noviembre al 4,87%, por encima del 4,5% establecido por las autoridades como máximo nivel tolerable.
El lunes, la cotización de la moneda brasileña cerró en 6,18 reales por dólar (+1,87%), tras superar los seis reales a finales de noviembre.
El Parlamento adoptó el viernes un paquete de medidas para reducir el gasto público en 70.000 millones de reales (unos 11.400 millones de dólares), aunque el ministro de Finanzas, Fernando Haddad, admitió que esto podría representar mil millones de reales menos de ahorro para el erario.
OPTIMISTA. Sin embargo, Lula mostró su optimismo, cuando la mayor economía de Latinoamérica está en camino de registrar un crecimiento del 3% este año y la tasa de desempleo está en su nivel más bajo en 12 años.
“Hemos cosechado los frutos de nuestro trabajo, pero debemos seguir sembrando (...) para que nuestra cosecha sea cada vez más generosa”, declaró el lunes por la noche.
“Soy aún más fuerte”, dijo en el discurso, mostrando agradecimiento por la “cadena de solidaridad” y los “mensajes de cariño” que recibió durante su hospitalización en São Paulo.
El presidente de Brasil, Lula da Silva, concedió indulto navideño a presos en condición de vulnerabilidad, como mujeres embarazadas y personas con discapacidades o enfermedades graves, como cáncer y VIH en etapa terminal. En el tradicional perdón concedido con motivo de la Navidad, establecido mediante decreto y publicado de forma extraordinaria en el Diario Oficial, Lula excluyó a los condenados por crímenes contra el Estado Democrático de Derecho, como es el caso de los golpistas que buscaron derrocarlo el 8 de enero de 2023. Asimismo, fue negado para líderes de organizaciones criminales y para los presos que hayan cometido crímenes hediondos, tortura, terrorismo, racismo, lavado de dinero...