El presidente del PDT, Carlos Lupi, dijo a periodistas que, tras una reunión de la dirección del partido, fue decidido de manera “unánime” apoyar “a lo que es más próximo, que es la candidatura de Lula”, frente a la del presidente Jair Bolsonaro, quien aspira a la reelección en la segunda vuelta del 30 de octubre.
Lula ganó la primera vuelta del pasado domingo con un 48,4 % de los votos, frente al 43,2% que obtuvo Bolsonaro.
Gomes, quien figuraba tercero en todas las encuestas, quedó finalmente en cuarto lugar, con un 3,04%, por detrás de la senadora de centroderecha Simone Tebet, tercera con un 4,1%.
El ahora ex candidato del PDT, que en la campaña fue tan duro en sus críticas a Bolsonaro como a Lula, aún no se ha pronunciado sobre su posición personal para la segunda vuelta, pero, según dijo Lupi, se ha comprometido a “seguir la posición del partido”.
Lupi aseguró que ni Gomes ni el PDT podrían “omitirse” en este momento, en que Brasil deberá elegir entre “un demócrata como Lula” y un “aspirante a dictador como Bolsonaro”.
Según el presidente del PDT, las únicas condiciones para apoyar a Lula ya han sido aceptadas por el frente que lo postula.
Se trata de propuestas defendidas por Gomes en su campaña, como la adopción de un plan de renta mínima universal, la renegociación de las deudas que tienen las familias más pobres y un programa que establezca la educación de tiempo integral para los niños y jóvenes.
El PDT, una formación histórica de la centroizquierda brasileña, se suma así a un vasto frente progresista conformado por Lula para estas elecciones, que ahora pasa a contar con once partidos.
AFP