Tras la fallida apuesta por Michel Barnier el ‘europeo’, Macron intenta ahora otra vía, Bayrou el centrista, el rural, una opción menos escorada a la derecha con la intención de atraer a componentes de la alianza de izquierdas, en particular los socialistas, con el objetivo de que estos tomen el relevo de la extrema derecha como sustento parlamentario necesario para el nuevo Ejecutivo.
Después de tres intentos de acceder al Elíseo, 2002, 2007 y 2012, y tras una alianza con Macron a partir de 2017, Bayrou logra su mayor función, después de haber sido dos veces ministro, diputado durante décadas, eurodiputado y cargo local, sobre todo alcalde de Pau.
PESO POLÍTICO PROPIO. Aunque es un fiel macronista, por su experiencia y trayectoria a Bayrou se le atribuye un peso político propio que le permita tomar distancias con el Elíseo.
Bayrou, el sexto primer ministro de Macron y el cuarto de este convulso año político marcado por el adelanto de las legislativas a julio pasado, tendrá ahora que poner en práctica el ideario que lleva predicando desde hace décadas, el de superar barreras ideológicas, con un parlamento dividido en tres bloques hasta ahora irreconciliables.
“Soy consciente de que me enfrento a una montaña de dificultades, un Himalaya (...) pero estoy convencido de que existe un camino inédito, marcado por la voluntad de reconciliación para superarlo”, aseguró el jefe del Gobierno en su toma de posesión. EFE