La morosidad en San Cristóbal, cuyo anterior presidente, Juan Carlos Ozorio, fue destituido, entre 2020 y 2021 ya se encontraba en el orden de un 15%, mientras que en el primer semestre de 2022 la cifra se disparó, para alcanzar al mes de junio el promedio de 27,59%. Por otra parte, la cartera morosa mayor a 60 días llegó a un monto de G. 111.122 millones, con una evolución de 8%.
“El índice de morosidad al cierre del ejercicio 2020, arrojó un porcentaje de 15,04% del total de créditos, el porcentaje va incrementándose, llegando al 27,59% al 30 de junio de 2022, evidenciando de esta forma que dicho indicador va aumentando aproximadamente 2,5 puntos porcentuales al mes”, detalla el informe.
El reporte del Incoop también explica que el índice referencial de morosidad a ser tenido en cuenta para las cooperativas es máximo hasta dos puntos porcentuales más del promedio de morosidad publicado por el ente regulador, al cierre del ejercicio anterior. En ese sentido, cabe mencionar que la media de mora del sector a marzo de 2022 es de 7,85%.
“Por tanto, la cooperativa se encuentra muy por encima del porcentaje permitido, lo cual significa que la cartera de créditos mayor a 60 días ha aumentado considerablemente en estos últimos periodos, dejando en evidencia la mala gestión en la concesión de los créditos y seguimiento en la recuperación de cartera morosa”, dicen los técnicos del regulador.
Beneficiados. El aumento del incumplimiento de pagos se relaciona con las irregularidades que se evidenciaban en la entidad solidaria, que beneficiaban a políticos importantes y a personas investigadas por presuntos vínculos con esquemas de narcotráfico y de lavado de dinero, entre otros.
Uno de los casos más sonados es el de Basilio Núñez, quien según los datos accedió a un préstamo a sola firma de G. 1.020.497.167, el 19 de noviembre del año 2020, a un plazo de 12 meses, a instancia del Consejo de Administración de San Cristóbal. Pese a haber declarado un saldo disponible mensual de poco más de G. 2,3 millones, la cuota de su préstamo quedó fijada en G. 103 millones.
De esta forma, se produjo un nivel de endeudamiento poscuota de 482%. A su vez, la intervención descubrió que el préstamo en cuestión fue otorgado sin garantía real, y no se tuvo en cuenta el análisis del oficial de créditos (en contra de la concesión).
Refinanciación con facilidades
Otro caso similar es el de Félix Jiménez, ex presidente del Incoop, quien en la misma fecha que Núñez accedió a una refinanciación a sola firma de G. 1.719.769.468, con casi las mismas observaciones que Núñez. Ambos aparecen además en un apartado específico sobre préstamos mal concedidos y pagos realizados de origen dudoso, sin considerar las recomendaciones de analistas y “vulnerando en todos los casos normas establecidas en el manual de créditos, reglamento de créditos, resoluciones del Conad (Consejo de Administración) y del Incoop”.
Los montos se elevan si se consideran las operaciones con descuentos de cheques, conforme a los reportes.
las cifras
27,59
por ciento ya era el nivel de morosidad de San Cristóbal en junio pasado, según análisis hecho por el Incoop.
1.020
millones de guaraníes logró como crédito de manera muy fácil el diputado Basilio Núñez de la cooperativa.