El presidente Mario Abdo fue consultado este martes sobre el análisis de la agencia internacional Fitch Solutions, que estima que la Asociación Nacional Republicana (ANR) podría no aceptar el resultado si pierde en las elecciones del 30 de abril.
Si bien en un primer momento intentó evadir la consulta, resaltó posteriormente que las alternancias de gobiernos son comunes en las democracias de todo el mundo.
“Debe ser una moneda corriente la alternancia. Con eso no quiero decir que tiene que caer mi partido. Yo quiero que gane. Pero nosotros no tenemos que asustarnos de la alternancia. La alternancia se da en todo mundo. Yo creo que esta democracia está consolidada”, vertió el jefe de Estado.
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Entre otras cosas, destacó que cuando el Partido Colorado perdió el poder después de 60 años con la victoria de Fernando Lugo en el 2008, se tuvo una transición pacífica.
“El Partido Colorado ya demostró su compromiso con la democracia y vamos a ganar estas elecciones”, recalcó durante su visita a la subestación Yguazú de 500 kV de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) en Alto Paraná.
La agencia internacional Fitch Solutions indicó que el candidato colorado Santiago Peña será derrotado por el de la Concertación, Efraín Alegre, aunque anticipa que será por un ajustado margen.
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La victoria estrecha de Alegre, según Fitch, se deberá a que la ANR sigue siendo el partido más grande en Paraguay, pese a que el sentimiento contra los gobiernos oficialistas aumentó en América Latina.
“En caso de que gane la Concertación, no podemos descartar que los dirigentes colorados impugnen las elecciones o intenten mantenerse en el poder, lo que supondría un riesgo considerable para la estabilidad”, concluye.
En otro momento también se refirió a los dichos del candidato a jefe del Ejecutivo por la ANR, Santiago Peña, quien comparó la sanidad pública con el sistema financiero, y afirmó que “se habrá equivocado” o tuvo que haber sido una mala interpretación, debido a que los colorados tienen como línea el fortalecimiento de la salud pública.
El presidente Mario Abdo Benítez no accedió al abrazo republicano. Sin embargo, no quiere pelearse con el cartismo y evita en actos públicos hablar de Peña y de Horacio Cartes, presidente de la ANR y declarado significativamente corrupto por los Estados Unidos.
Solamente, se limitó a realizar sus propias reuniones con los principales referentes de Fuerza Republicana y los candidatos para el Congreso.