Monseñor Ricardo Valenzuela, obispo de Caacupé, uno de los primeros en saludar al Papa, fue quien recibió la pregunta directa de Francisco: ‘‘¿Me traen chipa?’’. El obispo confirmó que sí estaba previsto llevarle el delicioso manjar.
Posteriormente, otro miembro de la delegación, Marcos Cabañas, secretario ejecutivo de la Pastoral Nacional de la Comunicación, se acercó al Santo Padre mostrando una bandera paraguaya y, al ver la chipa, el papa Francisco expresó su alegría con un gesto que indicaba que la comería tan pronto terminara la reunión.
‘‘Me trae la chipa’’, dijo el Pontífice, quien además envió ‘‘muchas bendiciones para el Paraguay’’ antes de impartir su bendición a cada uno de los presentes, relató Marcos Cabañas, responsable de Comunicación católica local en peregrinación en Roma.