A partir de hoy se empezará a inmunizar contra el Covid-19 a las personas de entre 18 a 49 años de edad que padezcan alguna enfermedad de base o comorbilidad.
En efecto, la gente de esta franja etaria deberá acercarse hoy munido de su certificado médico en el que se deje constancia de que uno está cursando alguna de las patologías que pueden despertar formas agresivas y hasta letales del Covid.
En este escenario, y ante la ansiedad que hay en la población en general por recibir el inmunizante, varios médicos revelaron ayer a través de las redes sociales que gente cercana a ellos ya empezaron con sus pedidos de certificados falsos.
Ocurre que esto de pedir reposo o constancias a los profesionales de blanco, es algo recurrente y muy instalado en la sociedad. Ahora, con el dilema de la priorización del grupo de vulnerables por la baja disponibilidad de biológicos, se apela a la honestidad y ética de los especialistas en salud. “Queridos amigos y/o ‘conocidos’. No rompan las b.. con lo del certificado si no tenés enfermedad de base. Gracias”, compartió en Twitter el Dr. Elías Jacobo Coppari.
Así también, otros colegas suyos acusaron recibo de los avivados de turno y dejaron en claro su postura ante el pecheo. “No es ser mbore (argel) si no te doy un certificado de contenido falso para vacunarte. Estoy cuidando mi integridad y dando la posibilidad a los que les toca en esta etapa la oportunidad de vacunarse”, publicó el Dr. Francisco Giménez, en esa misma red social.
“Cómo perder a tu amigo médico: pedirle certificado falso”, expuso el Dr. César Aponte y contó a ÚH que recibió “30 a 35” pedidos al respecto, tanto de pacientes como de ex compañeros de colegio.
“Estamos habituados a que nos pidan certificados, desde el día 1 de recibirnos nos dicen: ‘Felicidades, ya sos doctor ¿Podés hacerme un reposo para el lunes?’ y tenemos una defensa automática”, comentó.
Y señala que en esta ocasión tan particular y tan importante para la salud pública, los mecanismos de defensa o evasión que suelen esgrimir dieron paso a una “negativa mucho más consciente”; es decir, “negarse porque además de estar mal desde el vamos, esta vez hay que insistir en que tenemos que apoyar la vacunación con todas nuestras herramientas”, reflexionó.
El Dr. Héctor Castro, director del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), apeló a la honestidad para la certificación de enfermedades de base. “Lo único que pedimos es que el médico que firmará el certificado tenga su registro profesional”, afirmó Castro al admitir que no es fácil en una primera consulta determinar las enfermedades de base del paciente. “En el caso de la hipertensión muchos están con un tratamiento, eso ya es una forma de comprobar”, apuntó el director del PAI.
Este sábado, empezarán con las personas que tengan la terminación de cédula 0, 1, 2, 3 y 4. Mañana, les tocará el turno a los de 5, 6, 7, 8 y 90. Desde ayer varios se acercaron a los vacunatorios para recibir la vacuna.
Pese a que existe mucha expectativa, ante la esperanza que representan las vacunas anti-Covid para este segundo grupo vulnerable, no se inscribió ni la mitad de las personas que padecen alguna condición clínica subyacente, de acuerdo con la proyección poblacional.
De las más de 1,2 millones de personas que se estima que tienen alguna comorbilidad, a nivel país, hasta ayer se llegaron a registrar en el portal www.vacunate.gov.py, unas 240.000 personas. En tanto que se cuenta con alrededor de 252.000 dosis circulantes para todas las regiones del país. No obstante, a las personas de 18 a 49 años aplicarán las vacunas Sputnik V y las de Moderna, cuyo lote llega hoy.
Los que no detallaron que tenían enfermedad de base deben mandar un correo especificando su situación a actualizaciones@mspbs.gov.py o consultasvacunate@mspbs.gov.py.