Los efectos de la pandemia de Covid-19 en la economía paraguaya están restringiendo el consumo de productos y servicios a un nivel tal que el Banco Central del Paraguay (BCP) corrigió su proyección sobre las importaciones a una contracción de 5,7% para el 2020, desde un crecimiento de 3,7% que se esperaba a fines del año pasado.
Esta intensidad de la caída en la adquisición de productos foráneos es superior a la merma de 1,5% pronosticada para las exportaciones, cifra que también fue corregida desde la estimación anterior de expansión de 4,8%, según el último Informe de Política Monetaria (IPOM) publicado por el BCP.
En consecuencia, el resultado esperado para el mercado de divisas se revirtió desde las estimaciones de diciembre de 2019: de un déficit de cuenta corriente de 0,6% del producto interno bruto (PIB), se pasó al anuncio de un superávit de 0,7%. Esto significa que la banca matriz considera ahora que habrá más ingreso que salida de divisas, lo que coincide con la mayor calma que exhibió la moneda norteamericana al cierre del mes pasado.
El economista jefe del BCP, Miguel Mora, informó que el mercado cambiario permanece “relativamente estable” en lo que va del año y las presiones que se habían visto en ciertos periodos se han atenuado, en línea con las reducciones de las tasas de referencia y las inyecciones de liquidez desde la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés).

En este escenario, el ente emisor relajó su intervención en el mercado cambiario, pues las compras de divisas duplicaron a las ventas en abril de 2020: las primeras sumaron USD 216,3 millones y las segundas, USD 100 millones. En el mes anterior, esta diferencia fue de solo USD 6,7 millones, con compras de USD 100,3 millones y ventas de USD 93,6 millones. En el primer cuatrimestre del corriente año, el BCP inyectó USD 359 millones, frente a los USD 499,8 millones que compró del sector público.
“La apreciación del dólar se ha atenuado en relación a las principales monedas de países desarrollados, principalmente desde comienzos de abril. En el plano local, la participación del BCP en el mercado de divisas, en lo que va del año, se ha limitado principalmente a las operaciones compensatorias, de acuerdo con el economista jefe.
El BCP espera una merma de 5,7% de las importaciones para este año, por la menor demanda interna de productos y servicios. Así, habrá un superávit de 0,7% en la cuenta corriente del país.
Escenario de hogares deprimidos
La caída de 6,6% que según el BCP tendrá este año el consumo representa el retroceso más fuerte de la demanda de productos y servicios por parte de las familias desde el 2002, cuando este indicador llegó a sufrir variaciones trimestrales de hasta -7,2%.
Las primeras señales de esta situación se observaron en la deflación mensual de 0,2% que se registró en abril de 2020. Se trata de una reducción de precios de la canasta básica asociada a las menores compras que resultaron del freno a la actividad económica. El economista César Barreto calcula que, en general, hubo una caída del consumo de 30% respecto a abril de 2019; especificando que los datos de compras con tarjeta exhiben un aumento de 26% en las ventas de supermercados.