La Cumbre se hará en el salón de convenciones de la Conmebol, en Luque.
El día antes, será la reunión ordinaria del Consejo del Mercado Común (CMC) y las reuniones preparatorias, se harán la semana antes, la mayoría por videoconferencia, según adelantó el embajador Raúl Cano Ricciardi, viceministro de Relaciones Económicas e Integración del Ministerio de Relaciones Exteriores.
De confirmarse la venida de todos los presidentes, se espera la presencia de Alberto Fernández (Argentina), Jair Bolsonaro (Brasil); Luis Lacalle Pou (Uruguay), y el anfitrión, Mario Abdo Benítez, por los países fundadores del bloque sudamericano. Pero también están invitados los jefes de Estado de Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Surinam como Estados asociados.
Además participan los cancilleres y ministros de Economía y hacienda de todos estos países mencionados. La organización de la Cumbre corresponde a Paraguay que ejerce la presidencia rotativa del Mercosur, la cual transferirá a Uruguay.
El gobierno tiene previsto invertir G. 500 millones en ceremonial para esta reunión de jefes de Estado.
La Cumbre se realizará en un contexto de mucha turbulencia regional, principalmente ante la proximidad de las elecciones en Paraguay y Brasil. Tendrá además como telón de fondo la preocupación por las acciones del crimen organizado y el narcotráfico en la región.