Benjamín Grassi, meteorólogo y profesor universitario, explicó que se tendrán un otoño e invierno con pocas lluvias y sequías. Además como el cambio climático no se detiene, serán también calientes.
“Es un panorama bastante delicado porque si tenemos menos lluvias y tenemos un ambiente caliente en otoño, esas lluvias de otoño que suelen alimentar los ríos van a estar debilitadas, entonces nuestros ríos estarán con aguas por debajo de lo normal”, explicó en conversación con Radio Monumental 1080 AM.
Mencionó que el “otoño normal” suele traer en mayo y en junio frío y heladas, lo que es muy probable que en este año no se registre esa situación y que sea un otoño cálido, con pocas lluvias, incluso en invierno, en los meses de julio, agosto y hasta en setiembre.
Afirmó que el invierno será “suave” y no se prevén situaciones de un invierno “riguroso”, según los pronósticos.
“El problema del invierno seco y caliente es que alienta a los incendios y ese es un gran problema; el 2020 nos demostró que no estamos preparados para los incendios, tenemos que prepararnos para los incendios con sistemas de alerta, hablar con la gente, con los municipios. El año pasado tuvimos incendios en zonas urbanas y casas amenazadas por incendio”, lamentó.
Anunció que los incendios forestales se tendrán en junio, julio y agosto, lo que será “bastante peligroso”.
El meteorólogo instó a trabajar para que los incendios se puedan controlar y evitar males.