El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) prevé la incorporación de 20 buses eléctricos con el nuevo proyecto de Metrobús Abierto que se implementará en el corredor de la ruta Mariscal Estigarribia-Eusebio Ayala-Puerto de Asunción.
Así informó ayer a este diario Óscar Stark, gerente del proyecto, y señaló que las empresas que operan en este trayecto –en total 8 líneas de colectivos– podrán acceder a estos buses pagando una parte de su costo.
“El proyecto tiene previsto la financiación de 20 buses eléctricos. Estos serían entregados a las empresas que están operando en el corredor con dos criterios de distribución, que sería la proporción de buses que tienen actualmente funcionando y la predisposición de pagar una parte del costo de los buses de las empresas del corredor”, expresó.
Por otro lado, Stark señaló que también se le obligará a las diferentes empresas del transporte público para que cada año agreguen nuevos buses eléctricos a sus flotas. “Adicionalmente se establecerá un porcentaje de buses que tienen que ser cambiados por buses eléctricos cada año. De esta manera, en un periodo de por ejemplo 10 años la gran mayoría de los buses serán eléctricos; es decir, empezar con 20 y luego crecimiento gradual”, indicó.
Consultado sobre el presupuesto que disponen para la implementación de este nuevo sistema, el funcionario señaló que aún cuentan con USD 70 millones del préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) –incluyendo una parte de la contrapartida local– que no se llegó a invertir en el fracasado plan del gobierno anterior.
El proyecto. La actual administración del MOPC decidió implementar el Metrobús Abierto, que es un sistema con buses convencionales (con puertas a la derecha), paradas bajas y carriles exclusivos también en el medio de la avenida, una modalidad implementada en varios corredores de Buenos Aires.
Justamente, hace unas semanas, técnicos del MOPC visitaron los sistemas implementados en la capital del país vecino, que ahora se pretende copiar (ver fotografías).
El sistema argentino funciona con carriles exclusivos para diferentes líneas de colectivos, a diferencia de los modelos de Curitiba o el TransMilenio de Bogotá –que pretendía implementar el gobierno anterior–, donde circula una única línea haciendo el recorrido por las diversas paradas y en este caso son buses altos con puertas a la izquierda.
Con la ejecución del sistema argentino se deberán demoler las paradas que fueron construidas por Mota Engil, las cuales están preparadas para los buses altos con puerta a la izquierda. Asimismo, con este sistema se disminuirá la cantidad de afectaciones en todo el corredor.