César Ramón Ortiz Sosa, quien sería el segundo del clan Rotela, acudió hasta el Palacio de Justicia para participar de un juicio oral y mediante un control preventivo se descubrió que tenía las llaves de las esposas que le habían colocado, informó el periodista de Última Hora Raúl Ramírez.
Los encargados de la seguridad se dieron cuenta de que el enjuiciado por un caso de supuesto asalto tenía consigo la llave del dispositivo de seguridad en su billetera.
El juicio oral se hace bajo estrictas medidas de seguridad en atención a la peligrosidad de los procesados.
César Ramón Ortiz Sosa fue detenido en el 2019 junto con otras tres personas en una serie de allanamientos tras supuestamente asaltar una estación de servicios situada en el barrio Panambi Retã de Asunción.
En aquella ocasión, los responsables del hecho se llevaron a mano armada unos G. 30 millones. Las imágenes del circuito cerrado fueron claves para identificar a los sospechosos.
El clan Rotela es considerado como un peligroso grupo criminal que se disputa el dominio de los centros penitenciarios del país.