Ayer, con dictamen listo de la Comisión de Hacienda, Legislación y Presupuesto, la mayoría oficialista, dio luz verde al pedido, recurriendo de esta manera a un mecanismo muy utilizado durante la gestión del denominado clan Zacarías, conformada por Javier Zacarías y su esposa Sandra McLeod, que juntos manejaron el destino de la comuna esteña por más de 18 años.
A la sesión solo asistieron los oficialistas Valeria Romero, Alison Anisimoff, Pedro Acuña, Sebastián Martínez, Óscar González, Víctor Torales (presidente) y Maria Portillo, la única del Partido Liberal. Los colorados, que conforman la bancada de oposición estuvieron ausentes. Este es el segundo año que Prieto recurre a un préstamo para cerrar el año. El año pasado solicito G. 10.000 millones.
El intendente al justificar dijo que a diferencia de la administración de los Zacarías, hoy la Municipalidad tiene muchas más inversiones. “Cuando yo entre como intendente el limpiador cobraba G. 1.900.000, hoy cobran el salario mínimo. Los directores cobraban G. 4.000.000 hoy cobran G. 15.000.000 y los jefes cobraban G. 3.000.000 y hoy cobran G. 6.000.000 y esto obviamente aumenta el costo operativo de la Municipalidad”, refirió al justificar el pedido de préstamo.
Aseguró que se redujo mucho el nivel de corrupción, mencionando que antes los directores que ganaban G. 4.000.000 tenían mansiones alrededor del lago Acaray. “Hoy el único que tiene soy yo, ningún director. Mejoramos muchísimo la Municipalidad y estamos teniendo un pequeño atraso (dos meses) que quiero regularizar”.
DETALLES. El préstamo, que será destinado a cubrir el déficit de caja, corresponde a fondos del Banco Continental a una tasa de interés de hasta el 12%. La deuda será pagada en el ejercicio fiscal 2025, según el pedido del ejecutivo.
El pedido fue remitido a través del mensaje 566. Señala que conforme al informe de la Dirección de Administración y Finanzas los ingresos corrientes proyectados no serán suficientes para cubrir la totalidad de los gastos de capital y los gastos corrientes necesarios para el funcionamiento regular de la institución.
Ante esta situación justifica la necesidad de recurrir a préstamos para “garantizar” la operatividad institucional. “El análisis financiero destaca que la baja recaudación es común debido al ciclo de vencimiento de los impuestos, por lo tanto, la solicitud de empréstito se alinea a la cobertura de déficit de temporal caja”, señala el dictamen.