“Ha sido una reunión con un espíritu muy colaborativo y de mucha comprensión mutua”, dijo el ministro del Interior, Guillermo Francos, en una conferencia celebrada en la Casa Rosada, en la que compareció junto a los gobernadores de las provincias de Salta (centroderecha regionalista), Córdoba (peronismo disidente) y Catamarca (peronista).
Francos aseguró que Milei propuso celebrar a los gobernadores –ninguno de los cuales pertenece a La Libertad Avanza (ultraderecha), la fuerza política que encabeza– nuevas reuniones para tratar las problemáticas particulares de cada provincia.
Más adelante, Francos insistió en que la presidencia explicó las motivaciones de sus primeras medidas de ajuste económico anunciadas la semana pasada por el Ejecutivo argentino y manifestó su compromiso por ofrecer “una solución” a la reforma del impuesto de las ganancias, aprobado por el ex ministro de Economía y entonces candidato presidencial del peronismo, Sergio Massa.
Este cambio fiscal levantó ampollas entre algunos gobernadores del interior del país. Ocho provincias reclamaron al Gobierno que ponga en marcha herramientas de compensación ante el severo ajuste fiscal.
Tras la reunión, la denominada “liga de gobernadores”, que reúne a ocho mandatarios provinciales, mayormente peronistas, difundió un comunicado. Según el mismo, el Ejecutivo comenzó a aplicar un plan económico que incluyó una fuerte devaluación del peso sin medidas compensatorias para los trabajadores y los sectores medios” y por ello pidieron que el Estado reparta entre las provincias el 70% de lo que se recauda por el impuesto al cheque, idea que quedó plasmada en un proyecto de ley que lleva la firma de 22 gobernadores. EFE