La marcha discurrió desde la céntrica Alexanderplatz de Berlín y hasta las inmediaciones del distrito gubernamental, donde se encuentran la sede del Parlamento (Bundestag), de la Cancillería y de los principales ministerios.
La manifestación forma parte del movimiento denominado “Umverteilen” -o “Redistribución”, en alusión a la riqueza-, que desde hace unas semanas se convocan los sábados en la capital de Alemania y otras ciudades del país.
Sus consignas principales son el reclamo de que se expropie a las grandes inmobiliarias, causantes según los convocantes de la especulación inmobiliaria, así como de una redistribución de la riqueza “de abajo hacia arriba”.
Al movimiento del “Umverteilen” se adherieron en las últimas semanas organizaciones contra el cambio climático como Fridays for Foture, asociaciones contra la especulación inmobiliaria y movimientos cívicos de los distritos más afectados por el alza de precios en las viviendas de alquiler.
La inflación en Alemania se disparó en octubre al 10,4% a escala interanual, el mayor nivel en el país desde su reunificación (en 1990).
El precio de la energía doméstico subió un 55%, mientras que el de los alimentos lo hizo en un 20%, de acuerdo a las cifras publicadas el pasado viernes por el departamento federal de Estadística (Destatis).