“Ratificamos que nunca nos enfrentaremos con el pueblo a quien nos debemos y siempre velaremos por la paz”, subrayó la institución en un comunicado leído en La Paz por el comandante general de las Fuerzas Armadas bolivianas, Williams Kaliman.
Los militares recalcaron que garantizan la unión entre compatriotas, así como la convivencia entre hermanos y el desarrollo de nuestra patria. “Los actuales problemas generados en el ámbito político deben ser solucionados en el ámbito de los más altos intereses de la patria antes de llegar momentos irreversibles”, destacaron. Kaliman leyó la declaración, sin posibilidad de preguntas, acompañado del alto mando militar del país, ante la convulsión social en la que está sumida nuestra amada Bolivia.
El jefe militar afirmó que los uniformados se encuentran totalmente cohesionados bajo el mando militar, apegados siempre a la disciplina, orden y respeto a la Constitución, para la defensa, seguridad y estabilidad del Estado.
POLICÍAS SE REPLIEGAN. Policías de La Paz se replegaron ayer a una unidad de esa fuerza cercana a la plaza Murillo, donde se encuentran las sedes del Gobierno y el Legislativo bolivianos, un día después de que los uniformados en varias regiones se amotinaran. Canales de televisión mostraron a numerosos policías llegando a la sede de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales, en cuya puerta fue colocada una bandera boliviana. Los uniformados aún no han hablado de amotinarse, como ocurrió el viernes en otras regiones como Cochabamba, Chuquisaca y Santa Cruz, pero prevén reunirse para analizar la situación.
llamado al diálogo. El presidente de Bolivia, Evo Morales, llamó ayer a la oposición a instalar una mesa de diálogo en busca de la pacificación del país, inmerso en una grave crisis política y social desde las pasadas elecciones con tres fallecidos y cientos de heridos. El opositor Carlos Mesa rechazó la oferta de diálogo planteada por el presidente Morales, para pacificar el país inmerso en una grave crisis, e insistió en que el mandatario debe dejar el poder. “No tengo nada que negociar con Evo Morales y su Gobierno”, afirmó de forma categórica el ex presidente Mesa (2003-2005).
Por otro lado, un alto miembro del movimiento civil que exige la renuncia del presidente Morales, Marco Pumari, aseguró que la presión contra el mandatario seguirá sin descanso, mientras se extienden los motines policiales a La Paz. Pumari dijo además que “por el momento se mantiene (el lunes) para la entrega de la carta a Evo Morales”, en alusión a una misiva de renuncia del mandatario redactada por el colectivo civil encabezado por Luis Fernando Camacho, líder del Comité Pro-Santa Cruz.