La declaración fue en el juicio oral donde están acusados los ex senadores Óscar González Daher, Jorge Oviedo Matto, el ex ministro Carmelo Caballero y el ex secretario del JEM Raúl Fernández Lippmann.
La ministra Rojas comentó que cuando era fiscala, en el 2017, fue asignada al caso Electrofácil, junto al fiscal Aldo Cantero. Dijo que imputó y pidió prisión para Luis Saguier Blanco. Contó que en setiembre de ese año, llegaron a su oficina los abogados defensores José Domingo Almada y Carmelo Caballero.
Explicó que ella tenía buen trato con ellos. Por eso se sorprendió cuando Caballero primero le reclamó por qué no le avisó de la imputación y que pidió prisión, lo que le desprestigiaba ante sus otros clientes. Alegó que José Domingo Almada salió un rato y luego volvió. Ahí le dijeron que venían a comunicarle que la denunciaron ante el Jurado, que operarían para removerla y que luego la iban a demandar para sacarle todo lo que tenía.
Incluso, Almada (que no está acusado en la causa) le dijo que si tenía bicicleta que la vendiera porque le sacarían todo. Esto, ante Caballero.
Comentó que quedó muy alterada porque sabía que eran abogados con influencias. Luego alegó que llegó una comunicación del Jurado de la investigación en su contra y luego fue recusada.
Rojas comentó que fue a hablar con los miembros del JEM. Se entrevistó con Adrián Salas y Cristian Kriskovich, a quienes contó lo ocurrido. También visitó al presidente Óscar González Daher.
Refirió que Fernández Lippmann, a quien nunca había visto, le buscó para la entrevista. Primero fue a la secretaría, donde le mostró el expediente. Ante el reclamo de que no había motivación, este le dijo que sabía cómo era eso, que cualquier miembro podía pedir el enjuiciamiento.
Contó que luego fue a la oficina de Óscar González Daher, quien hablaba por teléfono. Dijo que después le preguntó qué le prometió a los abogados y no cumplió. Que ellos venían todos los días, y que su situación estaba fea, por lo que debía ver lo que tenía que hacer.
La entonces fiscala le trató de explicar, pero comentó que como no le hizo caso, se fue. Dijo que en anteriores entrevistas, nunca la trató así.
Las defensas consultaron si Fernández Lippmann o González Daher le habían pedido algo, habían influenciado en ella, a lo que ella dijo que nunca le pidieron nada. Refirió que luego habló con varios miembros del JEM, y que ninguno sabía nada.
Rojas dijo que cuando Almada (no imputado) la amenazó, entendió que habló también por Caballero.
Remarcó que tras salir a luz el caso de los audios, la denuncia fue archivada y que ella luego pidió su jubilación y su traslado a otra Fiscalía.
La asistente fiscal también testificó
La ex asistente fiscal Nadia Ramírez, actual funcionaria de la Senabico, declaró también en el caso de los audios, al igual que Alma Alvarenga, que depuso por la vía telemática.
Ramírez dijo que fue asistente de Teresa Rojas y que desde su oficina escuchó todo lo que dijeron los abogados José Domingo Almada y Carmelo Caballero. Indicó que luego la entonces fiscala Teresa Rojas quedó muy alterada por lo que la tuvieron que dar un calmante.
Por vía telemática, también declaró una auditora del IPS, Alma Alvarenga, quien dijo que no se acordaba de nada, ni escuchó la discusión. Teresa Rojas dijo que ella estaba cuando llegaron los abogados.
El juicio oral continuará esta mañana, a las 8:30. Declararán otras cinco personas.