La caída de las ventas en todos los rubros ya superaron, según los reportes diarios que envían los gremios que aglutinan a las mipymes, más del 50 por ciento de caída de los ingresos. Las empresas dedicadas al rubro de eventos aseguran que son las más golpeadas de todas porque están hoy con facturación cero y solo podrían empezar a trabajar de nuevo cuando pase la pandemia y la economía vuelva a moverse.
La estadísticas diarias de seguimiento de las mipymes aumentan negativamente a diario, al punto de que más del sesenta por ciento estaría cerrando en el lapso de un mes. Y los menos privilegiados ya estarían quedando fuera de juego en dos semanas más.
Para la Asomipymes, uno de los gremios que tiene más de 150 asociados, el oxígeno que necesitan consiste en medidas en torno a otorgamiento de facilidad de pagos del IPS de marzo a mayo y otras acciones para evitar el despido de empleados, de acuerdo con la necesidad de cada empresa.
También piden resultados concretos en materia de otorgamiento de créditos con facilidades de pago por parte del sistema financiero, que se les ha negado hasta ahora con el Banco Nacional de Fomento (BNF).
COMPLICADO. Hasta el momento, el reclamado auxilio financiero reclamado por los distintos rubros de mipymes al Gobierno no ha tenido una respuesta efectiva, aún cuando ya está oficializado un fondo de G. 600 mil millones de guaraníes de asistencia crediticia, que será impulsado por la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) y el BNF.
Esta propuesta cumple con los requisitos que responden a lo que plantearon referentes del sector, como el plazo de pago de hasta siete años con dos de gracia, además de un interés del 7 por ciento.
Sin embargo, el director de la Asociación de Emprendedores del Paraguay (Asepy), Crhistian Sosa, advirtió sobre el problema que se plantea con dicha línea habilitada para las mipymes.
Explicó que será muy difícil que los citados recursos puedan llegar a las mipymes que más necesitan actualmente, debido a que la mayoría de los emprendedores no están bancarizados.
Apuntó que los recursos podrán llegar solo a los que están bancarizados y gran parte trabaja más con las cooperativas. “El fondo puede servir para algunos, pero no para todos”, remarcó.
Añadió que algo que podrá ser de ayuda para paliar la situación extrema es una moratoria en el pago de servicios básicos, como la ANDE y Essap, al igual que la flexibilización con el aporte patronal obrero, pero que no signifique dejar sin cobertura a los empleados.
URGENCIAS. En cuanto a las urgencias que requieren los distintos rubros, el sector gastronómico es el que plantea la asistencia con créditos blandos, con años de gracia y el plazo más largo posible de financiación para, fundamentalmente, mantener el pago a sus trabajadores y esperar que pase la pandemia, a fin de empezar la recuperación.
La Asociación de Propietarios de Estaciones de Servicio y Afines (Apesa) asegura que el 70 por ciento de los 2.500 establecimientos pertenecen a pequeños y medianos empresarios que hoy día requieren oxígeno en el pago del IPS para poder mantener los empleos. Todos coinciden en la dificultad de seguir pagando el salario de sus colaboradores, además de los créditos, a raíz de que las ventas caen a diario y ya no hay forma de generar ingresos.
“Con facturación cero no podemos sostener empleos”
Sonia Cáceres, de la Asociación de Empresas Paraguayas Proveedoras para Eventos (Assepe), manifestó a ÚH que hoy se constituyen en el sector más golpeado y menos apoyado por el Gobierno para enfrentar las consecuencias negativas de la pandemia del coronavirus.
“El sector de eventos es el más afectado y menos apoyado. Estamos con facturación cero y así ya no vamos a poder mantener más empleos”, aseveró.
Apuntó que su empresa, Tatality SRL, que está entre las medianas del sector, está pagando sueldos con lo poco que cobra de trabajos anteriores y este es el momento en que ya no hay nada para ninguna empresa.
Refirió que el gremio tiene actualmente 760 socios a nivel país, pero creen que hay más de 1.500 que trabajan informalmente y viven de esto.
“A nuestros socios les pedimos que sostengamos los empleos, pero esto no se puede porque no tenemos facturación. Algunas medianas del rubro lo hacemos con los pagos de facturas atrasadas, pero ya no tenemos para los meses siguientes”, alertó.
salvataje. La nombrada empresaria comentó que recientemente le pidieron al viceministro Mipymes del MIC, Isaac Godoy, a fin de que gestione para que el Banco Nacional de Fomento (BNF) conceda préstamos de salvataje para las pymes, con garantía real y gracia de 36 meses para empezar pagar la cuota.
Sostuvo que el rubro de eventos es el último sector que se va a reactivar. “En nuestro sector hay gente que tiene hasta millones de dólares invertidos en equipos e infraestructuras y que deberán esperar para poder volver a operar”, subrayó.
Cáceres estimó que hay unas cuarenta mil personas que en forma directa están trabajando con las 760 empresas que realizan todo tipo de eventos.
“En esto trabajan desde los que confeccionan las tarjetas de cumpleaños, machuteros, sonidistas, los que colocan los carteles y que fácilmente pueden llegar a cien mil personas en el año”, aseveró.
Finalmente, insistió en que necesitan de una respuesta efectiva del Gobierno cuanto antes para la obtención de los créditos para poder mantener los empleos.
“Recursos son para aquellos que tienen deudas”
El titular de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD), José Maciel, explicó ayer que los 600 mil millones de guaraníes que en forma conjunta con el Banco Nacional de Fomento (BNF) pondrán a disposición de las mipymes, son para las que ya son clientes y están pagando créditos en bancos y cooperativas.
Recordó que el programa en este caso se llama de “Financiamiento para la Reconversión de Operaciones Crediticias para las Mipymes” y que están con problemas de seguir pagando, debido a la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia del Covid-19.
Subrayó que la idea del citado monto habilitado “es para aquellos que no pueden pagar porque ya no tienen flujo de ingresos y es gente que ya está en el sector bancario o cooperativo”.
Apuntó que la AFD solo trabaja con bancos y cooperativas. “Hay muchos empresarios pequeños que no tienen crédito y que no están pudiendo pagar. Lo que le estamos diciendo con esto es metan todo en una bolsa sus créditos y se les da la posibilidad de pagar hasta en siete años con un período de gracia de hasta dos años”, precisó.
Maciel lamentó que no podrán atender con estos recursos a aquellas mipymes que no están bancarizadas. “Nosotros trabajamos con empresas formales que tienen una mínima documentación. El BNF habilitó líneas para capital operativo, pero también para empresas constituidas formalmente”, recalcó.
Reiteró que hay muchas mipymes como pequeños restaurantes, negocios como ferretería, entre otros rubros, que de una u otra forma tienen que pagar su deuda, pero no están vendiendo para poder hacerlo y serán los que podrán acceder a este programa.