01 may. 2025

Mirada optimista para inicio de década

Carlos Jorge Biedermann

El 2019 fue un año complicado. Desde finales del 2018 sabíamos que así sería, por todos los datos que manejábamos a nivel local, regional, global. Advertimos de esto, pero nadie o casi nadie se hizo cargo. También fuimos muy concretos en el tema de la nueva ley impositiva, que nos parecía y nos sigue pareciendo inoportuna.

El primer semestre fue muy duro en términos económicos para las empresas y para la gente en general, cayó el consumo, más contrabando de la región y se siguió gastando mal, a sabiendas de la caída de los ingresos. El dólar tuvo una importante apreciación, agregando un ingrediente que es principal y transversal a nuestra economía.

También temas políticos tuvieron mucha influencia en el clima emocional con afectación económica. De pronto, se tuvo que reconocer que el producto interno caería drásticamente, con opiniones y opinólogos de todos los pelajes y colores. Se reaccionó tardíamente, pero se empezaron a mover las obras públicas, el sector privado legal y formal hizo correcciones para sobrellevar el momento y en el tercer cuatrimestre dejamos de caer y miramos con buenas posibilidades al año 2020 y al milenio que se inicia.

Muy, pero muy importante la reunión entre los presidentes de EEUU y Paraguay, pues abre –¡si aprovechamos!– puertas antes impensables, lo mismo podría ocurrir con Mercosur / Unión Europea. Destacó también ahora la posibilidad de usar nuestro 50% de energía de Yacyretá y espero por el bien de nuestro inmediato futuro una buena negociación sobre Itaipú para que alguna vez seamos una potencia energética mundial.

Finalmente: mejoremos la calidad del gasto público y que la gente reciba contraprestaciones de servicios con calidad (salud, educación, seguridad física y jurídica y por supuesto infraestructura, imprescindible para ser competitivos y desarrollar el país) para todos los que aquí vivimos.