El edil lamentó el ataque al can, uno de los tres que resguardan el lugar, y mencionó que los otros están a salvo, incluida una hembra que recientemente tuvo crías. El vertedero, situado en una zona de difícil acceso con un portón bajo llave, presentó huellas sospechosas que indican un posible ingreso forzado.
“Estamos analizando huellas y ya tenemos dos sospechosos. Este acto no solo afecta al medio ambiente, sino también a la comunidad. El humo negro llegó a cubrir la Ruta 1 en la zona de Ypucú, lo que es muy grave”, añadió Colmán, quien pidió a las autoridades investigar a fondo para identificar y castigar a los responsables.
El incendio, que continúa activo, ha generado un daño ambiental significativo, afectando no solo el ecosistema local, sino también la calidad del aire en la región.
El caso ha puesto en evidencia la necesidad de reforzar la seguridad en los vertederos y de implementar medidas preventivas para evitar tragedias similares.
Las autoridades locales trabajan para contener el fuego y garantizar que los responsables enfrenten las consecuencias legales de sus actos. VR