La ceremonia solemne de imposición de palio arzobispal al monseñor Adalberto Martínez Flores se realizó este viernes de la mano del nuncio apostólico, Eliseo Antonio Ariotti, en coincidencia con el cumpleaños número 71 del arzobispo de Asunción.
“El palio que recibo como arzobispo metropolitano ha sido tejido con la lana de los corderos que el Papa bendice todos los años en la fiesta de santa Inés, y nos recuerda a los corderos y las ovejas de Cristo, que Él encomendó apacentar a Pedro y que a nosotros nos encarga seguir cuidándolos”, dijo durante la homilía.
La entrega se realizó en la Catedral Metropolitana de Asunción ya que el monseñor Martínez canceló su viaje a Roma para recibir la investidura que el propio papa Francisco, quien se reunió con otros 43 obispos, en una ceremonia que se realizó el pasado 29 de junio, con motivo de la festividad de San Pedro y San Pablo.
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“Agradezco al papa Francisco que se haya fijado en este servidor para llamarlo a ser pastor de esta porción del Pueblo de Dios. Desde esta sede Metropolitana de Asunción, le expreso una vez más mis sentimientos de fidelidad y de obediencia pidiendo su paternal bendición”, resaltó el arzobispo.
Desde el 2015 el papa Francisco retomó la práctica tradicional de entregar el palio arzobispal. Los arzobispos concelebraron con el Papa, participaron en el rito de bendición del palio y recibieron la prenda, pero sin imposición.
El pasado 17 de febrero, la Conferencia Episcopal de Paraguay anunció que Martínez fue designado por el Vaticano nuevo arzobispo de Asunción, en reemplazo de Edmundo Valenzuela Mellid.
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Posteriormente, Martínez fue incluido, el pasado 29 de mayo, por el papa Francisco entre los 21 nuevos cardenales a los que creará en un consistorio previsto para el próximo 27 de agosto. El Papa nombró 16 cardenales electores y cinco mayores de 80 años.
“El obispo, ni tampoco el cardenal, es un príncipe de la Iglesia. Por el contrario, está para servir a los demás: ‘El que quiera ser el primero, debe ser servidor de todos’, dice el Señor. En la Iglesia no debemos rivalizar por quién sabe más, iñaranduvea (el más inteligente) o habla mejor, para ser primeros; sino más bien competir por la toalla para ser servidores unos de otros”, destacó durante el acto.