El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) finalmente adjudicó ayer la construcción de tres nuevos establecimientos penitenciarios para las ciudades de Emboscada y Minga Guazú, por G. 190.965 millones (USD 31,1 millones al cambio actual).
Así anunciaron ayer el titular del MOPC, Arnoldo Wiens, y el ministro de Justicia, Julio Javier Ríos, en el Palacio de Gobierno, tras una reunión que mantuvieron con el presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
En cuanto a las obras a encararse en Emboscada, el lote 1 fue adjudicado a la firma Aponte Latorre por G. 62.324 millones y el lote 2 al Consorcio Cordillera, integrado por Edivi SA y Constructora Heisecke, por G. 62.299 millones.
Asimismo, el lote 3, para la construcción de la cárcel de Minga Guazú, fue otorgado al Consorcio Seguro, integrado por Engineering SA, Puntal de Luis Bóveda y Vial Sur, por G. 66.342 millones.
Las obras de los tres lotes se iniciarán en agosto y los grupos adjudicados tendrán 24 meses para culminar las nuevas penitenciarías, según informó Wiens.
Recordemos que en esta licitación se presentaron 16 oferentes, principalmente de empresas paraguayas. Asimismo, vale señalar que otra licitación para estas obras fue cancelada durante el gobierno anterior ante cuestionamientos del proceso, por lo que la actual administración realizó una nueva convocatoria.
El llamado en cuestión se dividió en 3 lotes (pabellones), de los cuales dos se construirán en Emboscada y uno en Minga Guazú. Cada pabellón estará capacitado para albergar 1.320 internos, es decir, los tres lotes licitados estarán preparados para 3.960 reclusos, según los registros oficiales del MOPC.
Según Ríos, las nuevas penitenciarías contarán con pabellones de máxima seguridad para la clasificación de criminales de alta peligrosidad. Asimismo, dijo que se encuentran negociando para que las binacionales Itaipú y Yacyretá financien otras dos nuevas penitenciarías, una para mujeres en Itauguá y otra en Canindeyú, zona que cuenta con una circunscripción judicial muy grande.
HUBO AHORRO SEGÚN CAPACO. El presidente de la Capaco, José Luis Heisecke, cuya empresa también resultó ganadora, señaló que “el gobierno anterior tenía previsto pagar G. 397.000 millones por las mismas cárceles”, que hoy se construirán a menos de la mitad. “En el Gobierno anterior ya estaba todo listo para la licitación a extranjeros que vienen y subcontratan a precios miserables y solo llevan nuestro dinero”, acotó.
Asimismo, ayer trascendió que el socio de Heisecke en esta adjudicación (lote 2), la firma Edivi, tiene vínculos con el presidente de la Essap, Natalicio Chase, pues la firma Edivi pertenece a Emilio Díaz de Vivar, padrastro de Chase.
Sobre este punto, Heisecke señaló: “Nuestro consorcio ganó por precios. Si hubiésemos estado en quinto o sexto lugar tendría mis dudas, pero nuestro consorcio ganó por precio”, indicó.
El anuncio oficial de las adjudicaciones se dio sin que Wiens haya firmado la resolución de adjudicación, lo cual recién se dio en horas de la tarde.