Desde la secundaria se destacó en certámenes de belleza y con el tiempo se volvió modelo de alta costura. Paseó por las pasarelas de un gran evento de moda, como el Asunción Fashion Week, y posó para importantes revistas de tendencia local. Priscila Noelia Gächter Skanata (24), aunque viene del mundo del modelaje, se volcó a lo industrial. Aprendió a trabajar con las herramientas necesarias y logró desarrollar con sus propias manos la primera moto eléctrica del país.
“Cuando empezaba la carrera, mis compañeros pensaban que yo no iba lograr nada, decían que iba para figurar nomás, y no fue así”, cuenta Priscila, quien siguió Licenciatura en Diseño Industrial en la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción. Hasta para sus padres fue una sorpresa que optara por ese énfasis en la universidad. “Pero tengo de dónde salir”, prosigue ella. Sus familiares —después de comenzar sus estudios— le relataron que sus bisabuelos trabajaban en talleres metalúrgicos, arreglando y reinventando objetos de metal. Priscila desconocía esa parte de su historia genealógica. “Yo por ejemplo elegí la carrera sin saber que ellos hacían eso”, recuerda.
En el 2015 surgió la idea de la Mars, la moto eléctrica para primeros auxilios, denominada así por el planeta Marte, que tiene relación con el futuro, la tecnología y la optimización de recursos. Esto fue presentado como el proyecto de tesis de la joven inventora paraguaya, quien recibió la tutoría y acompañamiento en todo momento del diseñador industrial César Vega, quien ya había sido profesor de Priscila en algunas cátedras de la carrera.
César ya llevaba experiencia con la Quantum, un vehículo unipersonal de tres ruedas que se lanzó en el 2015 también como proyecto de tesis de las exalumnas Talía Saguier y Natalia Bobadilla. A Priscila le había inspirado aquel proyecto, por lo que con su tutor se plantearon diseñar algo diferente: una moto eléctrica para primeros auxilios. Las investigaciones duraron seis meses aproximadamente y la fabricación comenzó en el 2016. “Fue un proyecto muy complejo, pero disfruté de todo el proceso”, dice con satisfacción la creadora de la Mars.
Hecho en Paraguay
Diseñar, bocetar y dibujar. Es el paso a paso que siguió Priscila Gächter antes de colocarse los guantes y las gafas para ponerse manos a la obra. El 70% de la fabricación se trabajó en el taller de la universidad a la que va. Las piezas metálicas de la matriz se mandaron a hacer en otro lugar, con chapas de aluminio. Los materiales que cubren la matriz, la carrocería y partes de la carcasa fueron hechos con terminaciones artesanales.
Se utilizaron también pinturas especiales que evitan la corrosión y aseguran la durabilidad. Las pequeñas ruedas delantera y trasera están sujetas por monobrazos, lo que hace que un solo lado posea tazas de tapa llantas. Estas están elaboradas con base de MDF (aglomerado de fibra de madera). Además, cabe mencionar que toda la carcasa está hecha con polímero y fibra de vidrio. Priscila, tomando las herramientas, se encargó de los detalles que hacen a la terminación, como el masillado plástico, el lijado, la pintura y el pulido. De tal manera que la superficie de las piezas quedara uniforme y lisa.
A simple vista, la moto tiene un diseño compacto y práctico, basado en la sostenibilidad para el aprovechamiento de la electricidad. Su potencial eléctrico llega hasta 1.000 watts y 35 volteos. También posee un puerto USB, cuya carga es posible realizar mediante un diminuto panel solar que está ubicado en la carrocería. Carga hasta tres veces la batería de un celular. Cuenta con un sistema de luces LED incrustado en el frente y los costados, como así también una sirena luminosa para los casos de emergencia. Posee un maletín de primeros auxilios diseñado exclusivamente para que entre en un compartimento situado en la carrocería, que se abre haciendo un giro con el asiento. Esta pequeña maleta posee divisorias para adaptar la distribución de los medicamentos en el espacio que dispone, según la necesidad. La moto soporta hasta 110 kilos, incluyendo al conductor. Viaja a una velocidad máxima de 29 a 43 kilómetros por hora.
“Esta es la primera moto del país con estas características. La mayoría de la gente lo que hace es comprar una moto ya hecha —china o japonesa— y agregarle motores. Eso, por ejemplo, no es un diseño desde cero como este. Desde luego, hay que agregarle llantas, baterías y ruedas, que son importadas porque es más complicado producir acá, pero después todo lo que respecta al diseño de la moto se vio y se realizó aquí”, afirma el profesor César Vega.
Para Encarnación
La Mars fue creada con una función específica: andar sobre la Costanera de Encarnación. Priscila nació en dicha ciudad, aunque creció en Obligado, distrito del departamento de Itapúa. Para seguir su carrera, se mudó a Asunción. Pero como sus abuelos aún viven allá, viaja con frecuencia para visitarlos. Por esa razón pensó en implementar ahí un sistema de primeros auxilios que haga el recorrido con la moto eléctrica. Es más, el vehículo unipersonal está diseñado para que solo funcione sobre superficies planas.
“Está pensada para que pueda andar entre las personas y que la gente misma no se sienta invadida. Está en un punto intermedio entre una bicicleta y una moto grande”, expone César, quien también resalta que en el mundo aún no hay casos registrados similares a la Mars. Añade que sí hay bicicletas de otras partes del mundo que llevan cartucheras de primeros auxilios, en Inglaterra. En Belo Horizonte, por ejemplo, se llegaron a implementar las bicicletas ambulancias. Estos dos ejemplos son los que más se aproximan al modelo del prototipo.
La idea es que de alguna manera se fabriquen más unidades. El proyecto ya se presentó a la Entidad Binacional Yacyretá, mediante la cual se pudo financiar una parte de la fabricación. Desean gestionar otra solicitud con la que sea posible fabricar más unidades. Está en los planes también presentar el mismo proyecto a la Municipalidad de Encarnación, adelanta la joven.
Para Priscila, esto que alcanzó ya es un sueño logrado. Junta las manos, extiende los brazos, suspira, sonríe y expresa: “Pasar a una segunda etapa es un sueño aún más grande”.
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La Mars M1 es un vehículo unipersonal eléctrico para uso en zonas urbanas de media y corta distancia, de estructura compacta, capaz de acceder a lugares donde el espacio es reducido. Está equipado con implementos básicos de primeros auxilios para que un paramédico o técnico en urgencias médicas pueda asistir al afectado. Posee una mecánica de fácil mantenimiento, y conducción simple. Además, es amigable con el medioambiente.
