Doña Petrona Ramona Arévalos, una humilde adulta mayor de 87 años de la localidad Yby Yaú, oriunda de Belén, en el Departamento de Concepción, celebra este lunes que por primera vez en su vida pudo acceder a su cédula de identidad.
Con dicha documentación, la octogenaria finalmente podrá acogerse al beneficio de la pensión alimentaria para las personas de la tercera edad, según informó Carlos Escobar, corresponsal de Última Hora.
Isidro Alfonso, un docente y concejal municipal de Yby Yaú, del mismo departamento, fue quien realizó las gestiones para que doña Petrona pueda contar con la necesaria documentación y con ella posteriormente pueda acceder al subsidio.
Según explicó el mismo, cuando comenzaron a consultar en el Registro Nacional por los datos de la mujer, se les informó que la misma no aparecía en ninguna inscripción, por lo que desde ese momento se propuso a ayudarla.
Mediante la promulgación de la Ley 3728/09, el Gobierno estableció el derecho de los adultos mayores en situación de vulnerabilidad a acceder a la pensión alimentaria, cuyo primer requisito es contar con la cédula de identidad.
Se trata de una política de Estado que “consiste en una asistencia monetaria mensual, equivalente al 25% del salario mínimo vigente”, cuya aplicación está a cargo de la Dirección de Pensiones No Contributivas (DPNC) del Ministerio de Hacienda.