La ciudadanía cumplió y acudió en masa ayer a la manifestación convocada en apoyo a la apertura de listas sábana. El tratamiento del proyecto fue solicitado semanas atrás por el suspendido senador Paraguayo Cubas, quien lideró ayer un sector multitudinario, que movilizó a los organismos de seguridad.
Tras el resultado adverso a su proyecto (planteó que las listas sean abiertas), Cubas azuzó a su grupo y se caldearon los ánimos, hecho que derivó en la reacción de los efectivos del orden que tuvieron que recurrir a la represión con gases lacrimógenos en las inmediaciones del Congreso y el Palacio de Gobierno.
La ciudadanía empezó a congregarse en las plazas frente al Congreso desde tempranas horas provenientes de varios puntos del país.
La primera tensión se dio al mediodía cuando un sector traspasó la valla de seguridad, generando la reacción de la policía, que recurrió a la fuerza para controlar a la multitud. Payo negó que fueran sus seguidores los que rebasaron la valla y acusó a infiltrados. La protesta se desarrolló entre piedras, balines, gases lacrimógenos, palos y con fuerte cobertura policial.
Ya desde las primeras horas, Cubas enervó los ánimos cuando en un video advertía que fusilaría al presidente Mario Abdo Benítez si no escucha las exigencias de la gente de terminar con los “indeseables”. En todo momento encabezó la jornada y tras el fracaso de su proyecto amenazó con incendiar el Congreso en un fuerte discurso. Mientras tanto, otro grupo mayoritario lanzaba consignas en contra de los actuales legisladores. La mayoría dijeron que están hartos de sus representantes y urgieron el cambio.
El momento de mayor tensión se vivió a la tarde, cuando Cubas encabezó una turba que quiso forzar la seguridad militar para llegar al Palacio. Fueron dispersados con gases lacrimógenos generando una corrida generalizada.