12 ene. 2025

Museo El Mensú guarda retazos de historia de la capital del Alto Paraná

Para abril culminarán las tareas de ordenamiento interior y se solicitará a Senatur incluir como un sitio turístico a visitar en Ciudad del Este. También se quiere atender al público los sábados y domingos.

Wilson Ferreira

CIUDAD DEL ESTE

El Museo El Mensú busca convertirse en un punto de referencia de Ciudad del Este. La estructura fue sometida a trabajos de mantenimiento y recuperación y actualmente bajo el asesoramiento profesional se está montando y ordenando el interior, mientras se concluye la digitalización de antiguas fotografías.

Para mediados de abril está prevista la conclusión de los trabajos y la intención es firmar un convenio con la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur), para incluir el sitio en la campaña de promoción de lugares turísticos a nivel nacional e internacional, explica José Riquelme, responsable del museo.

Mencionó que ya presentó un proyecto a la Dirección de Cultura de la Comuna, para habilitar el espacio los sábados, domingos y feriados. Por ahora, la atención al público es de 7.00 a 13.00 horas de lunes a viernes.

La pieza más valiosa del museo es la misma estructura, que es la primera edificación instalada en la nueva ciudad. Fue sede de la Comisión de Administración y posteriormente albergó la intendencia municipal. Desde 1999 pasó a convertirse en el museo de historia El Mensú. Fue inaugurado el 3 de febrero del 2000.

REGALO. “Esta casa fue un regaló de un empresario alemán de Encarnación, que trabajaba en el rubro de la yerba mate. Cuando supo que Stroessner (Alfredo) tenía el interés de fundar una ciudad acá en la frontera él le ofreció y posteriormente le dio toda esta estructura”, apuntó.

“Se trata de una casa prefabricada, es una caja prácticamente”, refirió Riquelme al destacar que “no tiene un solo clavo”. “Todo va encastrado”. En alzaprima y carreta se trajo hasta este lugar y se armó, desde aquí se empezó a trabajar por la fundación de la ciudad”, dijo.

EQUIPADO. La tarea de recuperación del edificio incluyó la compra de muebles destinados para la exhibición de las obras de colección del museo que hoy ya se puede apreciar. La casa cuenta con un completo archivo fotográfico desde su fundación, así como documentos, como el acta fundacional. Se pueden observar equipos y herramientas utilizados para la construcción de la ciudad, como el teodolito, máquinas de escribir, primeros televisores, monedas, además de diferentes tipos de objetos utilizados en los primeros años de fundación de la ciudad. Se destaca el reloj gigante que en la década de los 80 estaba ubicado frente a la que hoy se conoce como rotonda Monalisa, microcentro de la ciudad.

También se pueden apreciar numerosos elementos etnohistóricos utilizados por los indígenas que habitaron los alrededores de la recién creada ciudad en la última etapa de la década del 50. El museo cuenta con muestras de restos óseos de animales silvestres, como el tatú o el jabalí, entre otros.