“La música es la medicina del alma”, decía Platón, y esta frase es tan certera hoy con el avance de la técnica denominada musicoterapia que sirve para sanar o tratar a bebés prematuros, niños con cáncer, personas autistas, con alzhéimer y otras patologías o simplemente como terapia personal.
Una guitarra, tambores, una flauta o música digital son algunas de las herramientas de la musicoterapia que está ganando terreno en el país en los hospitales públicos, especialmente dirigida a pacientes pediátricos. También sirve como terapia para las personas que sufren estrés, depresión y otros. (Ver infografía).
Melodías para sanar. La música es el arte de combinar los sonidos y silencios de forma bella y agradable, entonces la musicoterapia es utilizar los elementos de la música de forma inteligente, con objetivos concretos para ayudar a reestablecer el equilibrio y salud de la persona, destaca el doctor Ignasi Campos Serra, músico español, con posgrado en Pedagogía Musical, máster en Musicoterapia y doctor en Holomusicoterapia.
“La música puede ayudar a sanar. Hay ciertas afecciones que solo con la música se pueden curar. Es un coadyuvante en cualquier tipo de terapia para que sea eficaz”. La aplicación de la terapia musical se realiza con un equipo multidisciplinario: terapeutas o sicólogos y un musicoterapeuta.
“Una persona enferma es una persona desafinada. Es una persona que tiene ciertos órganos que están desafinados, los médicos y terapeutas podemos ayudarle a que se afine. ¿Cómo? Escuchando música, improvisando, usando técnicas, diálogos musicales, hay diferentes técnicas que pueden ayudar a afinar la esfera motora, intelectual, espiritual, por la ley de sincronía”.
Un total de 20 técnicas se utilizan en la terapia, dependiendo de cada paciente. Por ejemplo, la más utilizada es Guided Imaginery and Music, (GIM), que usa imágenes guiadas con música. Otro método, que se denomina Efecto Mozart, hace que las personas sean más inteligentes y equilibradas. “Los niños están 40% más por ejemplo en un examen de matemáticas que un niño que no haga música normalmente”.
La musicoterapia se aplica en diferentes ámbitos: escolar, clínico, crecimiento personal y otros. Botiquín musical, denomina Ignasi Campos al playlist que selecciona para tratar al paciente dependiendo de cada caso.
EXPERIENCIAS. Debido a que no hay profesionales especializados en el tema, Ignasi Campos trabaja de manera voluntaria en el aula hospitalaria del Hospital de Clínicas con niños con cáncer y los padres.
En el Hospital Materno Infantil San Pablo realizó una investigación para demostrar que la musicoterapia ayuda a los niños prematuros internados en terapia a disminuir el estrés. La técnica se aplicó con los bebés prematuros, madres y personal sanitario. “La musicoterapia aplicada en forma sinérgica a las tres poblaciones tiene buenos resultados”. La técnica también se aplica en el Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS).
“La música está presente en todo, porque el universo es vibración. El sonido crea formas. La música tiene un gran poder de ordenar el caos y crear cosmos, que significa orden”, sostiene Ignasi al tiempo de insistir que las melodías sanan. Y usted, ¿escucharía música para sanarse?
¿Carrera de Musicoterapia?
Con el fin de formar a más especialistas, la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción (UCA) habilitará la Licenciatura en Musicoterapia en el 2019 y tendrá una duración de cuatro años. El Consejo Nacional de Educación Superior (Cones) aprobó este año la apertura de la carrera.
Talleres, seminarios y cursos realiza Ignasi Campos para formar a personas interesadas en aplicar la terapia. Un total de 10 alumnos cursan en el país un Masterado de Musicoterapia, con una duración de 17 meses, mediante un convenio con Cambridge International University.
El Primer Seminario Magistral de Musicoterapia se realiza mañana, de 9.00 a 12.00, en el Hospital de Clínicas y está dirigido a la comunidad académica.
Las personas interesadas en acceder a los cursos o talleres pueden comunicarse con Ignasi Campos al celular (0982) 676-476.