El intendente Óscar Rodríguez, mediante los miembros de su gabinete, detalló dónde y cómo se invirtieron los G. 500.000 millones obtenidos mediante bonos. Resaltó la construcción de desagües pluviales y “obras agresivas”, para hacer en corto tiempo “lo que no se hizo en años”.
Rodríguez indicó que es importante que los funcionarios participen y “puedan saber la realidad de la situación y evitar conjeturas”.
“Celebro este momento oportuno de poder venir al pleno a explicar todos los cuestionamientos y consultas que tengamos”, prosiguió e hizo mea culpa por haber esperado tanto tiempo para rendir cuentas.
“Quiero decirlo, con mucha seguridad, que aquí no se esfumó G. 500.000 millones, no se desvió G. 500.000 millones. La plata no se esfumó, no se desvió, la plata se usó”, afirmó y explicó que “van a honrar cada compromiso que hicieron con la ciudadanía”.
Acotó que el municipio se ciñó al marco jurídico y a las herramientas legales de la cuenta única, para poder prestar todos los servicios que la comuna asuncena tiene.
“El municipio no dejó de invertir en obras, no se dejaron de hacer obras, no dejó de prestar servicio, el municipio no dejó de pagar deudas anteriores o las nuestras. No dejamos de pagar a ningún proveedor”, se defendió.
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“Nosotros nos agarramos de las herramientas legales que tenemos para utilizar y prestar el servicio que corresponde”, insistió y recordó que durante la pandemia “tuvieron los números en contra”, pero que no dejaron de trabajar.
En otro momento, se justificó diciendo que su administración “planteó obras agresivas” y logró hacer en corto tiempo “lo que no se hizo por muchos años”.
“Si queremos progresar, indefectiblemente debemos endeudarnos”, dijo. El jefe comunal detalló que decidió apostar por obras de infraestructura que necesita la ciudad.
Argumento jurídico
Durante la sesión, la abogada Emilia Yugovich, coordinadora de la Dirección de Asuntos Jurídicos de la Municipalidad de Asunción, explicó extensamente que existen recursos que en un momento específico del ejercicio no son requeridos.
“Hay recursos requeridos por otro programa en ese momento, y lo que permite la ley y el reglamento es administrar ese flujo financiero sin comprometer el presupuesto”, refirió y acotó que las municipalidades tienen la facultad de organizarse administrativamente, a través de sus reglamentos, para cumplir con sus fines.
“Las normas legales y reglamentarias que hacen a la cuestión de la cuenta única están todas cubiertas bajo el principio de legalidad en el marco de nuestra competencia”, indicó y enfatizó que la cuenta única es una herramienta más que se dispone en las administraciones para manejar su flujo.
A su turno, director de Administración de Finanzas, Erwin López, enfatizó en que uno de los beneficios es la disminución del costo financiero y resaltó el ahorro que obtuvo la municipalidad a través de la cuenta única para gestionar su liquidez.
Nenecho y sus directores declararon en su momento que el dinero faltante de los fondos de bonos se destinó a gastos operativos, lo que generó cuestionamientos ante las prohibiciones de utilizar el crédito para obras en gastos corrientes, de acuerdo con la Ley Orgánica Municipal y la de Financiamiento del Estado, que además se encuentran por encima de reglamentaciones.
G. 2.5 billones aproximadamente es el pasivo del municipio, entre deudas a corto y largo plazo.
Unos G. 817.500 millones es la deuda por emisiones de bonos, con fondos faltantes y obras aún sin ejecutar.