La fiscala Natalia Fúster inició una investigación tras la denuncia contra el senador colorado Silvio Ovelar, presidente de la Cámara Alta, por supuesta administración en provecho propio, ya que había autorizado la contratación de su hijo en el Congreso, poco después de asumir el nuevo periodo legislativo.
Fue la abogada Teresa Flecha quien hizo la denuncia, afirmando que Ovelar “admitió públicamente haber mantenido conversaciones con Raúl Latorre Martínez, titular de la Cámara de Diputados, a quien autorizó la contratación de su vástago”.
La profesional recordó las palabras del senador ante los medios de prensa: “Latorre me preguntó y cometí el error de aceptar”... “Yo no sé si ese mismo trato Raúl le ha de dar a otra gente”.
De esta manera, dio a entender que el trato efectivamente fue especial con su hijo, aparentemente teniendo en cuenta la amistad.
Lo que estipula la administración en provecho propio es que se da cuando “el funcionario público que decida, autorice o suscriba actos o contratos administrativos que otorguen, en forma directa, beneficios indebidos para su provecho personal, o para su cónyuge o conviviente o el de sus parientes hasta el segundo grado de consanguinidad o segundo de afinidad”.
OFICIOS. La fiscala Fúster ya envió el primer oficio, esta vez directo al Congreso, donde solicitó informes sobre el legajo de Alejandro de Jesús Ovelar Ayala, como funcionario administrativo de la Cámara de Diputados y el extracto de sus remuneraciones en los 9 meses de trabajo.
Les dio un plazo de cinco días para que sean enviados a la Fiscalía los informes, los cuales se debían cumplir esta semana.
A la par, comunicó al Juzgado el inicio de la investigación, pero dice que es contra persona innominada.
El joven Alejandro había renunciado hace una semana su cargo como auxiliar administrativo de Raúl Latorre, por la presión ciudadana.
Ante los cuestionamientos, había dicho que “un derecho fundamental es el derecho de poder trabajar. Es una cuestión en la cual se quiera poner en tela de juicio las funciones en el cargo de la persona en torno al relacionamiento con esa persona. Eso no me parece muy coherente”.
Alejandro Ovelar se encontraba percibiendo más de G. 3 millones, según él contó, por hacer impresiones y organizar la agenda de Latorre.
SE DESTAPÓ. Recientemente, los medios de comunicación empezaron a destapar la red de familiares de legisladores y autoridades que están repartidos por el Congreso, bajo funciones de cargos de confianza.
Primeramente, salió a luz el caso de Ovelar, luego también de la hija del actual vicepresidente de la República, Pedro Alliana, Montserrat Alliana, quien gana un sueldo de G. 18.274.300, como asesora.
Posteriormente, se conoció que varios familiares del diputado José Domingo Nino Adorno, ex gobernador de Alto Paraguay, estaban también con cargos de confianza en la función pública.
Una de las abordadas en ese caso fue su hija, Silvana Jazmín Busto Adorno (23), quien está como “encargada de despacho” en la oficina del papá y que fue contratada por él mismo, pero ella negó que se trate de un caso de nepotismo.
Por último, saltó al escándalo que el hijo de la senadora Roya Torres. Elías Martín Godoy estaba figurando como asesor de su propia madre, ganando G. 9.500.000.