“Aprendí sola mirando videos en Youtube y hasta ahora solo miro los videos para aprender más. Cuando empezó la pandemia y las clases eran virtuales empecé a hacer galletitas y bizcochuelo, medialunas por la tarde, alcé fotos en el estado de WhatsApp de mi mamá y tuve éxito, vendí todito, así empezó mi trabajo como repostera”, explicó la niña.
La novel repostera mencionó que anhela tener su propia confitería y con sus ingresos estudiar la carrera de Veterinaria, pues ama a los caballos, además destacó el apoyo que le da su familia para realizar su trabajo.
“Quiero tener mi propia confitería y estudiar Veterinaria porque me encantan los caballos, mi papá me ayuda para las terminaciones de las tortas, mi mamá me ayuda con la limpieza de mis elementos y mis hermanos sacan las fotos para promocionar y hacen el delivery”, agregó la menor.
Por el momento, vende sus productos solo por pedido en Santiago, y surte de torta a un hotel rural de la zona para sus eventos. La niña insta a los otros niños a utilizar internet para aprender cosas y producir.