Ante esta situación, la prevención es la mejor estrategia, dijo la doctora Marta Von Horoch, del Departamento de Epidemiología y SIS del Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS). Añadió que una de las formas más eficaces de evitar el contagio es a través de hábitos básicos de higiene, especialmente el lavado frecuente de manos con agua y jabón.
Entre los síntomas de la enfermedad destacó que pueden variar, pero algunos de los más frecuentes incluyen fiebre alta, dolor de cabeza intenso, malestar general, vómitos, rechazo de los alimentos, convulsiones y alteraciones en la conciencia. En los niños pequeños, muchas veces los signos son más sutiles, como irritabilidad o somnolencia prolongada.
“Es fundamental enseñar a los niños a lavarse las manos antes de comer, después de ir al baño y tras sonarse la nariz. En las escuelas también se debe prestar atención a la limpieza de bebederos y evitar que los alumnos tomen agua directamente de los grifos”, explicó.
Entre otras recomendaciones insistió en no compartir utensilios, ni recipientes para bebidas como el mate o el tereré, y mantener los baños desinfectados, utilizando productos como el hipoclorito de sodio.
Otra medida clave es la vacunación. El IPS recuerda a los padres la importancia de mantener al día el esquema de vacunas. (Ver infografía).
Si se toman medidas lo antes posible, la meningitis puede tratarse de manera satisfactoria.
El 80% de las meningitis están causadas por virus, entre el 15 y el 20% por bacterias, el resto está originado por intoxicaciones, hongos, medicamentos y otras enfermedades, detallaron desde el IPS.