“En estas condiciones no podremos seguir hasta mayo. No pedimos dinero, sino un rediseño del sistema con el que opera el transporte, basado en dos premisas: saber cuánta gente real está en la calle en función al decreto de cuarentena; y que se opere solamente con billetaje electrónico”, dijo César Ruiz Díaz, presidente de Cetrapam.
Desde el Viceministerio de Transporte respondieron a esta propuesta que además de la posibilidad del precio diferenciado del combustible, se analiza en el EEN una línea de crédito para con una baja tasa de interés para inyectar liquidez a las empresas, y tratar de adelantar el pago del subsidio del mes de marzo.
De igual manera, recordó lo que ya se les brindó a los transportistas como posibilidad de una refinanciación a 18 meses en los pagos del aporte patronal de marzo, abril y mayo al IPS; además de la postergación de pagos de marzo y abril a la SET y del canon de marzo y abril al Viceministerio; aparte de la ampliación de validación del ITV por 30 días y el procesamiento de las suspensiones laborales y remisión al IPS por parte del Ministerio de Trabajo, para dar cobertura de un porcentaje salarial a los conductores que queden cesantes.
Para Ruiz Díaz, la solicitud es en realidad un pedido de auxilio, para hacer frente a un “conjunto de obligaciones a las que estamos sometidos para la prestación del servicio. Entonces, la idea es que el Gobierno ponga el combustible y nosotros asumimos la otra parte del costo, es decir sacamos a la calle solamente los buses necesarios para transportar a la cantidad exacta de gente”, según dijo.
