En comunicación con La Sobremesa del Fútbol, en Monumental 1080 AM, ayer, aclaró que la decisión fue exclusivamente suya: “La decisión de dejar el fútbol fue absolutamente mía. Fueron 20 años de actividad fuerte y eso ya es mucho”, apuntó.
“El fútbol me permitió viajar mucho, hacer amigos en varios países, me dio la posibilidad de recibir mucho cariño de la afición. Viví momentos imborrables, pero fueron muchos años y el físico se resiente”, consignó.
CUENTA PENDIENTE. “El fútbol tiene ese tipo de cosas. No siempre pasa todo lo que uno planea. En Alemania (2006) no jugué por decisión técnica y después sucedió aquel hecho que no me permitió jugar en el Mundial (Sudáfrica 2010)”.
MALA EXPERIENCIA. “En Brasil decidí no seguir, porque no me agradó jugar en esa categoría (Tanabi, club de la Cuarta División de la liga regional de São Paulo). Me di cuenta que simplemente quisieron utilizarme, explotar mi figura. Caí en eso, porque mi deseo de jugar pudo más”, comentó.
El FUTURO. “Estoy pensando en dedicarme a enseñar a los niños en el complejo (SC 10 de su propiedad). Me voy a unir al grupo de profesionales que vienen trabajando con chicos de diferentes edades. Ojalá, Dios quiera, podamos descubrir algún talentoso, que se convierta en estrella del fútbol”, apuntó.
DESCARTA SER DT. “Es muy difícil; he decidido alejarme del fútbol profesional. He compartido de cerca el trabajo de algunos amigos itaugüeños técnicos y no me sentí atraído por ser entrenador”, finalizó.