Luego de conocerse la sentencia en contra de Óscar Venancio Núñez por millonario desvío en la Gobernación de Presidente Hayes, comenzó el debate sobre el proyecto de ley conocido como devolución premiada, ¿podría favorecerle? El fiscal del caso, Luis Said, no descartó la posibilidad.
En la semana, diputados aprobaron el proyecto con el que se pretende introducir al Código Penal que, “cuando se trate de hechos punibles contra el erario público cometidos por funcionarios, la pena podrá ser atenuada hasta el 50 por ciento”. Con esto, los que cometan corrupción podrían ser beneficiados.
“Si es una ley más favorable para el reo, lógicamente puede ser aplicada para este caso (caso Núñez) y directamente para otros casos anteriores”, confirmó el fiscal Said a la 1330 AM. Dijo que tratándose de un funcionario público, en realidad la pena debe ser elevada, ya que “tiene una doble responsabilidad en el manejo de la cosa pública”.
A TODAS LUCES. Luego de ocho largos años de proceso, finalmente, Óscar Núñez fue condenado de manera unánime por un Tribunal de Sentencia, que confirmó que se trató del caso “especialmente grave”. Se comprobó que entre el 2008 al 2013 –tiempo que estuvo al frente de la Gobernación de Presidente Hayes– cometió varios hechos punibles.
Las juezas Elsa García, Claudia Criscioni y Cándida Fleitas resolvieron la condena de 11 años para Núñez y dieron detalle por detalle cómo a través de los cheques se utilizó el dinero público, dejando un perjuicio a la Gobernación.
Según los documentos, el monto total de G. 42.503.556.035.
De junio del 2009 a julio 2010, Diana Rojas fue secretaria general del entonces gobernador. Ella cobró 15 cheques y todos fueron entregados a Óscar Núñez. El monto alcanzó G. 304.006.000.
El 16 de agosto del 2011, Carlos Samaniego, sin ser funcionario, cobró un cheque de G. 80 millones y le entregó a Núñez en su despacho. En el 2012, Julio Portilla recibió G. 1.418 millones y todo ese dinero también le entregó a Ñoño Núñez. El 19 de agosto 2011, Julio Roberto Núñez, hermano del ex gobernador, recibió un cheque de G. 52 millones que depositó en su cuenta personal. Al declarar, dijo que era por el cobro de una herencia.
En cuanto a Édgar Pérez, este confirmó que recibió y efectivizó dos cheques de la Gobernación, uno por G. 1.500 millones y otro por G. 338 millones, totalizando G. 1.838 millones. Lo grave es que en ambos casos, le entregó el dinero al ex gobernador.
Óscar D’ecclesiis le hizo un préstamo informal al hoy condenado por G. 200 millones. Le dio primeramente G. 60 millones en efectivo y luego un cheque por G. 140 millones. Además, le proveyó combustible por G. 50 millones usado para su campaña electoral. Fue con plata de la Gobernación que se le devolvió primero G. 100 millones y, posteriormente, G. 150 millones. El 16 de enero del 2013, el último día de su gestión, Óscar Núñez emitió un cheque por G. 109.542.130 a Emigdio Franco, que era personal policial y no funcionario. El dinero era de Fonacide y se usó para pagos de una carrera de caballos por G. 80 millones. Ese mismo día, Julio Chamorro, el chofer del gobernador, recibió un cheque por G. 80 millones y lo endosó. Tiempo después de efectivizarse el dinero, este fue y le entregó íntegramente a Ñoño, pero cuando ya no era gobernador. Había retirado otro cheque, también en octubre del 2012, por G. 11 millones y fue para pagar una cuenta privada.
CONDENAS. Núñez fue condenado a 11 años por lesión de confianza, administración en provecho propio y producción de documentos no auténticos. Tiene prohibición de ejercer cargos públicos por 10 años.
Junto a él, fueron condenadas otras cinco personas.
La Cifra
42.503.556.035 de guaraníes es el monto del perjuicio que causó solo Óscar Venancio Núñez al frente de la Gobernación.
