Los fiscales Liliana Alcaraz y Francisco Cabrera habían imputado por presunto tráfico de influencias a José Bogado, ex secretario del ex ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, a más de María Lorena De Barros Barreto y Diego Di Stéfano.
Los tres fueron citados por el juez para la imposición de medidas cautelares para el jueves, pero Bogado planteó recurso contra la providencia, porque no le notificaron a tiempo. Sin embargo, igual se presentó ante la jueza que suspendió la cita.
No obstante, De Barros Barreto ni Di Stéfano se presentaron, por lo que fueron citados de nuevo para el 16 de junio, bajo apercibimiento de declarar su rebeldía.

Después, se constató que en las notificaciones a los dos imputados indicaban que no vivían en esos lugares. Es más, en la casa de la supuesta imputada decían que ni siquiera la conocían y sobre Di Stéfano, que no vivía allí hacía dos años. Con ello, fueron notificados por edicto.
Con respecto a De Barros Barreto, fuentes extraoficiales señalaron que la misma estaría en España, aunque este dato no pudo ser confirmado.
El hecho es que tanto De Barros Barreto como Di Stéfano fueron notificados vía edicto transmitido por radio Nacional del Paraguay.