El hecho más resaltante de este contexto fue la división del llanismo por diferencias con el líder de la bancada, el diputado Édgar Ortiz, y su afinidad con el cartismo.
Los miembros de la nueva bancada L son Sergio Rojas, Manuel Trinidad y José Rodríguez, desprendidos de la bancada B (llanista); Antonio Buzarquis, Emilio Pavón, Eri Valdez, Ariel Villagra, Rodrigo Blanco, Fernando Oreggioni y Carlos María López, que desmantelaron la bancada A, que fue inicialmente efrainista y estuvo liderada por Salustiano Salinas, ya fallecido.
RUPTURA LLANISTA. Los tres diputados que se alejaron de la bancada llanista continúan dentro del movimiento Equipo Joven, liderado por el senador Blas Llano.

Sergio Rojas indicó que ya venían con muchas diferencias y que dentro de la bancada se formaron dos corrientes, pero que en los últimos días la situación ya se tornó insostenible.
Entre los detonantes del conflicto figuran las negociaciones de la mesa directiva en Cámara Baja, que mediante la unidad de la oposición y el apoyo de Fuerza Republicana se logró ubicar a un liberal como presidente, el diputado Carlos María López. Sin embargo, Ortiz y otros votaron por la continuidad de un colorado, el saliente titular Pedro Alliana.
Además, el último conflicto en el marco del intento de acuerdo para el juicio político de la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, agrandó la división.
Rojas señaló que la nueva bancada seguirá una línea más institucionalista, que acate las decisiones de la mayoría del Directorio del PLRA, actualmente liderado por Efraín Alegre, pero siguen contrarios al presidente. “Una bancada que responda a intereses y deseos del pueblo liberal”, subrayó.