En el tradicional saludo del Cuerpo Diplomático acreditado ante el Gobierno nacional, ayer, hubo reconocimiento a los esfuerzos del Gobierno, pero también el mensaje de que para alcanzar “metas siempre más ambiciosas”, los representantes de distintos países y organizaciones multilaterales anhelan de que se siga impulsando el fortalecimiento del marco institucional, se trabaje “por una participación ciudadana cada vez más amplia e inclusiva en la cosa pública”.
Este punto en particular en boca del nuncio apostólico, Vincenzo Turturro, que hizo de vocero del Cuerpo Diplomático, sonó muy oportuno considerando el contexto de persecución y desprestigio impulsado desde el Congreso Nacional por los senadores oficialistas en contra de las organizaciones de la sociedad civil (OSC) con la denominada ley garrote (de control de las oenegés) y la Comisión Bicameral de Investigaciones, creada con el mismo objetivo. El representante diplomático de la Santa Sede también abogó porque “se prioricen” las políticas sociales, se sigan desarrollando infraestructuras en todo el país y se implementen iniciativas útiles para cuidar el medio ambiente.
En la ceremonia que reunió a los embajadores y representantes permanentes de organismos internacionales, estuvo el embajador de los Estados Unidos, Marc Ostfield, cuya salida del país el canciller, Rubén Ramírez, había pedido que se adelante, porque el Gobierno le perdió la confianza.
El nuncio dijo que valoraban y aprecian todos los esfuerzos que el presidente Santiago Peña, personalmente, y su Gobierno están haciendo para que “la isla rodeada de tierra pueda darse a conocer y abrirse al mundo”. Ponderó positivamente la calificación del grado de inversión obtenida por Paraguay, “Son puertas que se abren. Esas puertas abiertas hacen entrar aire bueno, frescura, que deseamos alcance a los ciudadanos que cada mañana madrugan para agarrar el colectivo e ir al trabajo, los campesinos que revuelven su propia tierra para que dé frutos, los jóvenes y los enfermos que necesitan ser escuchados y atendidos”, resaltó.
Por su parte, el presidente Santiago Peña, en su discurso, resaltó que Paraguay “sigue siendo un país lleno de potencial y oportunidades de crecimiento”.
Destacó el grado de inversión otorgado por la agencia internacional Moody’s, el crecimiento sostenido de la economía, “un modelo económico que prioriza la estabilidad y el desarrollo social”. Citó el programa Hambre Cero y dijo que el país “logró avances significativos en la lucha contra el crimen organizado, la ciberdelincuencia y el fortalecimiento de la seguridad regional”. El jefe de Estado estuvo acompañado del vicepresidente Pedro Alliana y del canciller Ramírez.
Ellos recibieron el saludo de cada uno de los diplomáticos, entre ellos, de Ostfield.