Un 25 de julio del año 1902, un grupo de dirigentes encabezados por William Paats (el padre del fútbol paraguayo) fundaba del Club Olimpia, la primera entidad deportiva de fútbol de nuestro país. A partir de allí, comenzaría a escribirse una historia plagada de éxitos a nivel local y, sobre todo, a nivel internacional.
Tres Copas Libertadores, una Copa Intercontinental, dos Recopas, una Supercopa y una Copa Interamericana, le hicieron adueñarse del mote de “Rey de Copas”. Eso, sin mencionar que a nivel local también es el club más ganador, con 38 campeonatos.
LA DEBACLE. En el 2002, la dirigencia franjeada se propuso una meta más que pretensiosa: celebrar el centenario con la conquista de la tercera Copa Libertadores. Para sorpresa de los incrédulos, lo consiguió remando de atrás. Pero, a partir de ese año, la Recopa del 2003 fue la última alegría que el club pudo brindar a sus aficionados.
Sin éxitos locales desde el año 2001 (en el 2000 llegó al tetracampeonato) y sin conquistas y con escasas participaciones internacionales a partir del 2004, el club ha deambulado entre la crisis económica y futbolística. El golpe fue tal que hasta vencer a su tradicional rival, Cerro Porteño, e hizo difícil en los últimos años.
BUEN SÍNTOMA. Este año, tras el cambio de dirigencia (asumió Eduardo Delmás) y la sorpresiva destitución de Ever Almeida (lo reemplazó el uruguayo Gregorio Pérez), el equipo franjeado realizó una buena campaña al punto de haberse quedado con los cuatro duelos más importantes: los dos superclásicos ante Cerro y los dos clásicos blanco y negro.
Sin embargo, el fantasma de los fracasos reapareció en las últimas fechas y el equipo sufrió duras goleadas que lo dejaron fuera de la lucha por el título. Se fueron jugadores importantes y el también el técnico, ya que el presidente no pudo cumplir con su promesa de “armar el gran equipo para ganar el Clausura”.
NUEVA ILUSIÓN. Ahora, con Carlos Kiese iniciando su tercer periodo al frente del equipo y un plantel sin refuerzos de gran renombre pero con jugadores que ya están identificados con el club, Olimpia arranca una nueva ilusión.
El primer adversario en la búsqueda del título del Clausura será nada menos que Tacuary, un equipo que siempre complica al Decano y que la última vez le aplicó un doloroso 4-1. Pero eso ya es pasado, hoy los hinchas quieren celebrar el nuevo aniversario con triunfo, pues la esperanza de volver a los éxitos sigue intacta en esa fiel hinchada.