Por su parte, el comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, dijo que el informe de OMS no debe ser recibido con “histeria” y que “no se trata de dejar de comer carne”. “La carne tiene componentes que son necesarios para nuestro cuerpo, pero de lo que se trata es de no abusar y de no olvidarse de comer frutas y verduras”, informa EFE.
POSICIONAMIENTO. Al respecto, la nutricionista Carolina Sosky sostiene que “el problema son las carnes procesadas, no es en sí la carne, sino los procesos químicos a los que es sometida. Llevan muchos conservantes que consumidos a diario puede llevar una mayor probabilidad de que desarrolle cáncer”.
Con relación al desarrollo de la enfermedad oncológica, Sosky sostiene que hay otros factores, como genéticos y ambientales, que inciden en su aparición.
El consumo excesivo y a diario de las carnes procesadas es lo que puede influir para el riesgo de contraer la enfermedad. Los embutidos llevan muchos conservantes, nitrato y productos químicos, que pueden incidir en el desarrollo de la enfermedad. “Esto no quiere decir que si una persona consume una salchicha cada tanto va a tener cáncer sí o sí. Hay otros factores, que es la susceptibilidad genética”, indicó.
“Siempre se dijo que el exceso de un mismo alimento tiene sus riesgos, como en el caso de la carne. Eso no quiere decir que todas las personas tienen que volverse vegetarianas, ni que la carne en sí es un alimento malo. Se tiene que tratar de balancear al máximo”, explicó.
La carne roja proporciona hierro y proteínas.
La cocción de la carne es otro punto que se debe tener en cuenta a la hora del consumo. “La temperatura de cocción tiene un efecto sobre la incidencia del cáncer”, afirmó. Recomendó disminuir las carnes procesadas.
Comer no más de 4 veces por semana
Comer carne es saludable siempre que sea una porción sin abusar , día de por medio y hasta 4 veces por semana. Todas las carnes son fuentes de proteínas de muy buena calidad para el organismo, ya que aportan hierro, zinc y vitaminas, principalmente del complejo B. Lo aconsejable es intercalar los diferentes tipos de carnes durante la semana, es la sugerencia del Ministerio de Salud.
La recomendación del Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) indica que es preferible elegir aquellas sin grasa visible y quitar toda la piel de las carnes de ave y cocinarlas para disminuir la cantidad de grasa. Entre las menudencias se pueden comer el hígado, riñón y corazón por su contenido de hierro.
La Guía Alimentaria del Paraguay, elaborada por el INAN, indica que para una alimentación saludable es necesario consumir todos los días un poco de los 7 grupos de alimentos que la integran y de esta manera lograr el buen funcionamiento del organismo. Los alimentos deben estar distribuidos en cinco comidas: desayuno, media mañana, almuerzo, merienda y cena.
Para estar sano se aconseja comer diariamente verduras crudas y cocidas, en el almuerzo y en la cena. Las verduras deben ser de diferentes tipos y colores para aprovechar sus vitaminas y minerales. Proporcionan además, agua y fibra que ayudan a prevenir enfermedades como las del corazón y de las arterias, algunos tipos de cánceres y el estreñimiento.
Fibras. Se recomienda la ingesta diaria de 3 frutas de estación, porque tienen vitaminas. Consumirlas crudas y con cáscara las que se puedan o en preparaciones como ensaladas de frutas. Al preparar jugo de frutas se recomienda consumirlo dentro de la media hora para que no pierda sus vitaminas.
En el caso de los cereales, tubérculos y derivados está permitido consumirlos todos los días. Entre estos alimentos están incluidos los panificados, arroz, fideos, almidón, harina de trigo, pororó, locro, maíz, papa y mandioca.
Es importante comer igualmente legumbres secas con cereales dos veces por semana porque juntos alimentan mejor. La combinación de 4 cucharadas de legumbres como poroto, lenteja o soja, con 3 cucharadas de cereales como arroz, fideo o locro permite obtener una proteína de mejor calidad en reemplazo de la carne.
Se insta al aumento del consumo diario de lácteos a dos tazas de leche o yogur y un pedazo de queso para mantener huesos y dientes fuertes.