La enfermedad, que regresó a países donde estaba erradicada, como el Reino Unido, está teniendo un impacto devastador, causando enormes pérdidas de vidas, afectando a las economías nacionales y generando problemas en los sistemas sanitarios, advirtió la directora de inmunización de la OMS, Kate O’Brien. El número de casos globales se triplicó (a mediados de este año se superaban 360.000 en todo el mundo) y se declararon brotes en el continente americano (Brasil y Venezuela) donde el sarampión se consideraba erradicado.
Según el doctor mexicano Alejandro Cravioto, presidente del grupo de expertos en inmunización que se reunió en la sede de la OMS para analizar las campañas de vacunación en el mundo, la idea de que podemos erradicar el sarampión está ahora muy lejos, por lo que deben redoblarse los esfuerzos. Para el experto, uno de los retos es dar a conocer mejor el hecho de que son necesarias 2 dosis de vacuna contra el sarampión durante la infancia para una eficaz inmunización, ya que si bien la primera es inoculada a 86% de los niños en el planeta, la segunda sólo llega a 70%. La doctora O’Brien recalcó que en algunos países hay comunidades que no vacunan por razones religiosas, determinadas creencias o falta de entendimiento sobre la seguridad de las inoculaciones, en alusión al movimiento antivacunas que resurgió en países como EEUU. EFE