Se trata del ex deportista Luis Esteban Cañete Torres, procesado en el marco de la operación BET, por su presunta participación en un esquema de sobornos, extorsiones y amaños de partidos de fútbol femenino y masculino.
La medida fue otorgada por la jueza Alicia Pedrozo, bajo una fianza superior a G. 1.000 millones, informó NPY.
En la causa, el fiscal Federico Delfino presentó imputación contra siete personas por los supuestos hechos punibles de coacción, estafa y asociación criminal.
Lea más: Imputación en la operación BET: Así operaba el esquema de sobornos dentro del fútbol paraguayo
Los imputados fueron identificados como Luis Esteban Cañete Torres, Milciades Senén Cañete Grance, Víctor Pantaleón Valiente Piris, Dahiana Katherine Recalde Coronel, Yamilé Belén Caballero Peralta, Jonathan Darío Martínez Jara y Romina Fabiola Rodríguez Alvarenga.
Para los investigadores, el ex deportista habría conformado un grupo criminal con el fin de amañar resultados de partidos de fútbol, masculino y femenino, profesional y semiprofesional, organizados por la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF).
Le puede interesar: Operación BET: Policía busca al supuesto líder de la red de amaños, un ex futbolista
Todo esto con el fin obtener alguna ventaja económica a través de las apuestas deportivas. Con ese fin, habría conseguido el apoyo de Cañete Grance y Valiente Piris, quienes se encuentran ligados al ex futbolista por vínculos familiares y de negocios.
📌 Conceden arresto domiciliario a supuesto líder de red de amaño de partidos de fútbol
— NPY Oficial (@npyoficial) December 16, 2024
♦️ Luis Esteban Cañete Torres fue beneficiado por la medida otorgada por la jueza Alicia Pedrozo, bajo una fianza superior a G. 1.000 millones.
📱 Seguinos en nuestro canal de WhatsApp:… pic.twitter.com/4E9nVgVIHL
También se sospecha de que Cañete Torres contactó con jugadores del club General Caballero de Juan León Mallorquín para que actúen de una determinada manera durante la disputa de varios partidos.
Nota relacionada: Dictan rebeldía por imputado en caso de amaños deportivos
Es así que, presentándose como empresario futbolístico ante varios jugadores de primera división del club General Caballero, entregó USD 1.500 al grupo de deportistas para que “vayan a menos” y el rival obtenga una victoria.
En otra ocasión, habría contactado con el mismo grupo de jugadores para solicitar, previo al pago de G. 10 millones, que los mismos bajen en forma significativa su rendimiento.
Esto no se habría dado por parte del grupo de jugadores, por lo que exigió la devolución del dinero bajo amenazas.
Incluso de forma violenta impuso la obligación a los mismos de que deberían seguir las directivas o sus familias podrían salir perjudicadas.