La Policía Nacional, la Patrulla Caminera, el Ministerio de la Niñez y Adolescencia (Minna) y la Consejería por los Derechos del Niño, Niña y Adolescente (Codeni) realizaron el último fin de semana un operativo de concienciación a los conductores, jóvenes, adolescentes y padres con el propósito de resguardar la seguridad y el orden en la ciudad.
Héctor Quintana, jefe de la Patrulla Caminera del desvío de San Bernardino comentó a ÚH que tres personas fueron demoradas en la zona por carecer de registro de conducir. También fueron retenidos varios menores que se encontraban al mando de cuaciclones.
“Tuvimos tres demorados por carencia de licencia. Otros menores fueron retenidos por estar sin ningún tipo de protección y estar al mando de los cuaciclones. En esos casos se llama a los padres, se le entrega al adulto el cuaci y se le realiza una multa”, explicó.
Manifestó que no cuentan con la cantidad suficiente de oficiales para realizar los controles con 100% de efectividad, pero que hacen su mayor esfuerzo para llegar a todos los puntos de la ciudad. Recalcó que el caos vehicular es una constante cada fin de semana.
Seguridad. Policía, cuidacoches y descontrol. El oficial ayudante Brian Esteche refirió que en San Bernardino se encuentran apostados 500 policías (oficiales y suboficiales) trabajando para lo que sería el Operativo Verano el cual se divide en grupos. Asimismo, en días de conciertos son 150 los uniformados apostados en las afueras del anfiteatro donde realiza el control de cédulas de identidad y si portan o no algún tipo de armas o estupefacientes.
En cuanto a la seguridad de la zona céntrica y las zonas aledañas, indicó que se realizan los controles preventivos de menores conduciendo para evitar otra tragedia parecida a la ocurrida el pasado fin de semana.
“Ya que tuvimos un accidente la semana pasada comenzamos a realizar controles aleatorios sobre la ruta principal y zonas céntricas en control simultáneo para encontrar menores manejando. También tenemos personal hacia límites con Altos, hacia Ciervo Kuá y Pirayú. El fin de semana se refuerza la seguridad”, aseveró el uniformado.
A pesar de los controles, las calles de la villa veraniega siguen en descontrol y a la vista de las autoridades.
En días de concierto, los cuidacoches siguen haciendo de las suyas y cobrando G. 50.000 por el lugar. Según la Policía Nacional, los mismos se encuentran autorizados por la Municipalidad de San Bernardino para trabajar en la zona del Anfiteatro José Asunción Flores. La Municipalidad se encarga de proveerles de un carnet y chaleco a los que cuentan con el permiso. Aquellos que no tienen dicha identificación no deberían de trabajar en el área.