De acuerdo a la senadora opositora, se hace necesario un debate en la oposición, habida cuenta de que si las máquinas son adquiridas de empresas que están ligadas al oficialismo, más especialmente del presidente Peña, las posibilidades de una contienda justa se acortan.
“Mi posición personal es que si la empresa del presidente gana la licitación, la oposición debe debatir en serio si participa o no de las elecciones”, manifestó.
Respecto a qué camino deberían tomar la oposición y los sectores que se verían perjudicadas sus chances electorales en caso de que la adjudicación recaiga en la empresa del presidente, indicó que en primer lugar no deben bajar la guardia y estar alertas por lo que todo el proceso desde la compra misma debe estar auditado.
“Vamos a hacer el seguimiento del proceso licitatorio y del funcionamiento de las máquinas.”, refirió.
Reconoció, no obstante, que de hecho todo el sistema está copado por el Partido Colorado y sus prácticas ilícitas, desde la corrupción, la sobrefacturación y el uso de su maquinaria electoral con dinero supuestamente narco.
“Sabemos que todo el proceso beneficia al partido colorado. El uso de bienes públicos (salarios, contratos, servicios de salud, educación, becas, tercera edad, implementos agrícolas y similares), la corrupción en las compras públicas, los servicios que presta el Gobierno y se direcciona políticamente, la coacción de los funcionarios públicos y el día de las elecciones todo el uso del Estado, la compra de votos, el dinero narco”, sostuvo.
Proceso de adquisición. Cabe recordar que la Justicia Electoral tiene vía libre para la adquisición de máquinas de votación de acuerdo al anuncio que dieran autoridades tanto de la matriz electoral, como la de Contrataciones Públicas (DNCP), Juan Encina, participaron de una audiencia en el Senado y anunciaron que han destrabado el proceso de licitación.