Poco antes de las 17.00, llegaron Óscar González Daher y Rubén González Chaves hasta una vivienda ubicada sobre la calle Cruz del Chaco entre Miguel Torres y Cuartel de la Rivera, en el barrio Recoleta de Asunción.
Ambos fueron beneficiados este martes con la prisión domiciliaria, por disposición del juez Penal de Garantías Humberto Otazú, después de permanecer recluidos durante 10 meses en la Agrupación Especializada.
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Padre e hijo son investigados por supuesto enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y declaración falsa. Esto incluso causó la expulsión del político colorado del Senado.
La abogada defensora Sara Parquet intentó ocultar a los medios de prensa el lugar donde su cliente guardaría reclusión. Sin embargo, esto no impidió que hasta la casa llegaran medios de comunicación y hasta sus propios seguidores.
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Las personas que estaban esperando a que lleguen Óscar González Daher y su hijo, dentro de la residencia, cubrieron las rejas de los portones con bolsas negras.
La petición de medidas alternativas a la prisión fue trasladada al Ministerio Público. La fiscala Liliana Alcaraz mencionó que, a esta altura de la investigación, ya no existe peligro de obstrucción y que solo falta el análisis de un elemento probatorio.
González Daher y González Chaves fueron imputados por el caso que guarda relación con la inmobiliaria Príncipe Di Savoia.
La Secretaría de Prevención de Lavado o Bienes (Seprelad) elevó un informe contra ambos, después de haber detectado movimientos de sumas importantes de dinero de carácter sospechoso.